¿En algún momento te hiciste esa pregunta? Información, algoritmos, internet, ubicación, redes sociales e inteligencia artificial son temas que nos afectan más de lo que pensamos.
¿Dónde están y quién tiene acceso a mis datos?
¿En algún momento por tu mente pasó la idea de dónde están tus datos?
Te diré que, ante todo, ya no son tuyos porque están diseminados en la amplia galaxia digital, en gigantes almacenes digitales, albergados en lugares secretos, imposibles de conocer, pero no están solos, están acompañados por el resto de los datos de todos, seres que nunca vas a conocer, que ni siquiera sabés que existen, pero que cohabitan como ceros y unos.
Todos ellos forman una extraña comunidad, son activos de toda empresa que desee comprarlos y juegan con ellos en las estadísticas, forman perfiles para hacerte pensar que fue tu idea y desarrollan algoritmos que permiten tomar decisiones que afectan tu vida.
De lo contrario ¿Cómo pensás que llegan los mails de temas que te interesan o las promociones de lugares de soñaste, ofertas de cosas que nunca pensaste o sugerencias de amistad de personas que nunca viste? Y así al otro extremo del mundo hay gente que se está enterando de vos, de tu familia, de tus pasatiempos, inclusive del nombre de tu perro.
Ver: El truco para ordenar tu bandeja de entrada de manera definitiva
Sin saberlo hemos creado un gran hermano digital, dónde todos cohabitamos, desconociendo al otro, pero las maquinas si nos conocen, saben nuestros gustos, nuestros amigos, salidas, parejas, hasta el club de futbol por el cual gritás en la cancha los domingos.
No creas que es imaginación, pensá... Las cámaras de vigilancia que nos toman en nuestro recorrido diario, los celulares que aportan lo suyo a través de la ubicación y la conexión Wi-Fi, los registros que dejan las tarjetas de transporte, débito o crédito, etc.
Además, si sos fanático de redes sociales, mejor sentate y te cuento que China "hackeó" la base de datos de Tik Tok, teniendo en su poder todos los datos personales de los usuarios de Estados Unidos.
Otro caso digno de conocer es el de Google, que suspendió el programa de inteligencia artificial cuando comprobó que las máquinas pueden desarrollar "conciencia", lo cual nos traería un gran debate: ¿los robots tienen derechos?
Otro aspecto relevante es que estos adelantos pueden tener un lado no tan brillante: las maquinas se pueden equivocar porque en su construcción estuvo el ser humano y no somos tan perfectos; podemos, sin querer, transmitir nuestras mejores y peores cualidades a través de los algoritmos, que son el cerebro de toda acción en inteligencia artificial.
Ver: En qué consiste la nueva función de WhatsApp
Finalmente, hay algo que no te suelen señalar: esos datos que viajan y se transforman en dólares para algunos, los generaste vos y es tu derecho hacer con ellos lo que desees porque son tu vida y brindan detalles sobre ella, tus afectos, tus dolencias. La ley está de tu parte pues deben pedirte consentimiento para usarlos.
Tenés derecho a saber qué hacen las empresas con tus datos, cómo los obtuvieron, quién se los facilitó, etc. No es difícil lograrlo y hay algunos pasos a seguir, pero ese es otro capítulo...
Todo esto y mucho más formará parte de la Diplomatura en Ciberseguridad que está preparando el área de Posgrado de la Universidad Maza.