Este novedoso proceso, que permite tratar arritmias, tuvo lugar por primera vez en Mendoza. Cómo fue la operación donde confluyen medicina, ciencia y futuro.
Hito médico en Mendoza: se realizó la primera crioablación de Cuyo
El viernes 13 de diciembre tuvo lugar una operación de vanguardia que marcó un hito para la medicina de la región de Cuyo. La misma tuvo lugar en la Clínica de Cuyo, de la Ciudad de Mendoza.
Se trata de la primera crioablación para tratar fibrilación auricular, un procedimiento innovador que ofrece una alternativa mínimamente invasiva para los pacientes con arritmias cardíacas.
El equipo estuvo liderado por Carina Cantale, jefa del servicio de electrofisiología de la clínica, y contó con la proctoría de Raúl Pérez Etchepare, experto en esta técnica y capacitado por la empresa Medtronic, compañía que desarrolló el dispositivo médico.
La doctora Cantale dialogó con el Post y detalló que "el paciente, un hombre de 65 años que sufría de fibrilación auricular y no había obtenido resultados favorables con tratamientos farmacológicos previos, fue intervenido con éxito".
El paciente fue operado del corazón y dado de alta al día siguiente.
Según explicó Cantale, "la fibrilación auricular genera palpitaciones irregulares que afectan la calidad de vida del paciente". La crioablación, en este caso, permitió tratar la raíz del problema de manera efectiva y con una recuperación sorprendentemente rápida.
"Este avance significa que los pacientes de la región ya no tendrán que viajar a Buenos Aires u otras provincias para acceder a este tipo de tecnología de alta complejidad. Ahora, en Mendoza contamos con la posibilidad de resolver estas patologías a nivel local", destacó Cantale.
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¿Qué es la crioablación?
La crioablación es una técnica de vanguardia en el campo de la electrofisiología. A través de un catéter introducido por la vena femoral del paciente, se guía un globo lleno de nitrógeno líquido que alcanza temperaturas de hasta -50 grados. Este frío extremo "quema" el tejido anómalo en el corazón, desconectando las señales eléctricas irregulares que generan la arritmia.
"El procedimiento es mínimamente invasivo; al paciente solo le queda una pequeña punción en la ingle, sin cicatrices visibles. Al día siguiente ya fue dado de alta y ha evolucionado favorablemente", explicó Cantale.
El procedimiento es "mínimamente invasivo".
La intervención contó con un equipo amplio de profesionales, incluyendo al doctor Pérez Etchepar, técnicos de rayos, ingenieros especializados en la consola de crioablación, instrumentadoras y personal de electrofisiología.
"Esta tecnología es de las más avanzadas en el mundo, y su precisión y seguridad fueron clave para el éxito del procedimiento", destacó la especialista.
Con este logro, Mendoza se posiciona como un centro de referencia regional en el tratamiento de arritmias. La Dra. Cantale también enfatizó el potencial de replicar este tipo de procedimientos en el sistema público de salud.
"Estoy a cargo del servicio de electrofisiología en el Hospital Central, donde ya estamos logrando grandes avances. En la salud pública Mendoza también tiene procedimientos de primer nivel y grandes profesionales", declaró la doctora.
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