Desde la Asociación Mendocina de Expendedores de Naftas y Afines explicaron que las subas de hasta el 273% planteadas en la audiencia no impactarán en el precio, atado al valor del litro de nafta super de YPF.
AMENA advierte la delicada situación de las estaciones de GNC
En la audiencia pública convocada por el Ente Nacional Regulador del Gas, las distribuidoras solicitaron aumentos de hasta 273% en las tarifas, mientras que las transportadoras de gas reclamaron un ajuste de hasta el 163%.
La Asociación Mendocina de Expendedores de Naftas y Afines (AMENA) participó del encuentro presidido por el interventor de ese organismo de control, Osvaldo Pitrau, y llevó su propuesta para que el sector del GNC, que da empleo a 1600 trabajadores solo en la región de Cuyo, no siga perdiendo competitividad.
Es que las subas no impactan sobre el precio del GNC, que hoy se ajusta a un porcentaje del valor del litro de nafta súper de YPF. "Esta situación ha resultado perjudicial para las estaciones, debido a que nos vemos obligados a pagar precios que pueden estar por encima de los de mercado. Esto representa un eventual perjuicio para el sector", resaltaron desde AMENA.
Desde la Asociación explicaron que uno de los principales costos que tiene el GNC es el Gas PIST (Punto de Ingreso al Sistema de Transporte). "Desde el año 2017 las estaciones deben adquirir a un productor/comercializador los volúmenes de gas natural que van a despachar a sus clientes. Este sistema se vio afectado en ocasiones por la disponibilidad de Gas PIST. En ocasiones, y producto de un exceso de oferta, los precios tendieron a una baja. En otras ocasiones, resultó dificultoso para las estaciones poder proveerse de Gas PIST y por ende, tuvo que intervenir la Secretaría de Energía, ENARGAS y ENARSA para poder asegurar el abastecimiento", recordaron.
La situación cambió a partir del año 2021, cuando se establecieron contratos de mayor plazo con precios "atados" a combustibles líquidos. A esto se suma que los ajustes en el precio del Gas PIST dejaron al GNC en una situación de falta de competitividad frente a los combustibles líquidos. De representar el 35% del valor de la nafta súper, pasó a superar el 50% llegando en algunos meses a ser del 60%.
El mínimo de ventas llegó con el aislamiento por la pandemia de COVID19, pero en los años posteriores, la recuperación no ha sido suficiente para el sector. "El sector muestra su peor momento y la tendencia indica que puede seguir cayendo. Las estimaciones de ventas de noviembre/2022 y diciembre/2022, que aún no son publicados por ENARGAS, indican que las ventas siguen en retroceso", indicaron.
Ante este escenario, AMENA solicitó que las políticas elaboradas desde la Secretaría de Energía consideren un costo accesible al Gas PIST para las estaciones de GNC, que hoy abastecen a un amplio sector laboral como taxis, remises, camiones, transporte de pasajeros y vehículos que prestan servicios de traslado de bienes.
"Nuestra propuesta es fijar un precio del Gas PIST acorde a la situación, que
debería ser determinado por la Secretaría de Energía y comunicado al ENARGAS para su publicación en los cuadros tarifarios. Debería ser un valor indicativo de referencia, como sucedía hasta hace no mucho tiempo, concretamente el año 2019", señalaron.
En números: menos contaminación y más rendimiento
Desde AMENA recordaron que el GNC, además de reducir los costos de quienes trabajan en transporte, tiene un impacto positivo en el cuidado del medio ambiente, ya que disminuye la cantidad de gases de efecto invernadero que se produce por la combustión de los motores. Esto ha llevado a desarrollar también el transporte pesado y el transporte de pasajeros a GNC.
Sin embargo, el parque automotor abastecido con GNC en Mendoza alcanza alrededor de 117.000 vehículos, en una clara curva de descenso: en 2015 se llegó a los 140.000 vehículos convertidos.
"El consumo de GNC a nivel provincial para el período enero/octubre del año corriente ha sido de 114.2 MM de m3. Durante el año 2021 para el mismo período el consumo fue de 113.1 MM de m³", acotaron.
En la actualidad existen alrededor de 150 estaciones de carga de GNC a lo largo de la provincia de Mendoza, pero su funcionamiento está en riesgo si no se implementan las políticas activas que propuso AMENA para que el sector, fundamental en el engranaje de la economía, siga representando una alternativa viable para miles de trabajadores y vuelva a crecer.