La titular del INADI presidió un Foro de Naciones Unidas, se trabó al leer, no pudo nombrar organizaciones en inglés y además, habló para menos de diez personas.
El "papelón" de Donda en Suiza frente a un auditorio vacío
Tanto en las redes sociales como dentro del propio gobierno, la participación de Victoria Donda en el foro de las Naciones Unidas en Suiza, fue catalogada de "papelón".
La titular del Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (Inadi), viajó a Ginebra, para presidir el encuentro y habló en un auditorio donde había menos de diez personas.
Las críticas por el gasto que significó su viaje en un momento crítico de la Argentina y en medio de la prohibición a los ciudadanos para comprar pasajes al exterior en cuotas, se sumaron a las que surgieron con la imagen de Donda hablando en un auditorio vacío.
Es que, además, al tratarse de un evento híbrido, con participación presencial y también virtual, Donda podría haberle ahorrado el gasto al Estado.
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Además, recibió duras críticas por su presentación, ya que se trabó varias veces mientras leía y tuvo problemas en las pocas intervenciones que tuvo en inglés. La mayoría del tiempo habló en castellano.
Se trató de la decimocuarta sesión del Foro sobre cuestiones de las Minorías de las Naciones Unidas, donde Donda precisó que el objetivo del foro es "promover el diálogo y la cooperación en materia de políticas públicas y acciones en defensa de los grupos vulnerados".
"Lo que en la mayoría de los países del mundo se piensa como minoría en realidad son las mayorías populares. Por eso hay que seguir trabajando por el reconocimiento de los procesos y poner en evidencia la invisibilización social", declaró la titular del INADI durante el discurso de apertura.
En el cierre, Donda también habló de sí misma y dijo que "Argentina en la década del 70 vivió una dictadura que nos dejó desaparecidos y muchos niños y niñas apropiadas. Yo fui uno de esos niños (...) y hoy soy miembro del Estado Argentino porque creo que solo involucrándonos en las políticas públicas podemos prevenir este tipo de genocidios".
Algunas fuentes del Gobierno por fuera del área diplomática admitieron a Clarín: "Es una vergüenza". Y agregaron, parafraseando a la vicepresidenta Cristina Kirchner: "Es hora de que saquen a los funcionarios que no funcionan, pero eso lo decide el Presidente".
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