"Productividad", la posible salida a la crisis de los anestesistas de Mendoza

El próximo 4 de julio se cumplirán tres meses de la ausencia de profesionales expertos en anestesiología en los hospitales públicos, en reclamo de mejoras en sus honorarios. Hay una posibilidad de acuerdo más integral. El Gobierno analiza los números.

"Productividad", la posible salida a la crisis de los anestesistas de Mendoza

Por:Jorge Fernández Rojas
Periodista/Analista

Hoy se cumplen 80 días del inicio de la crisis de salud originada por el paro de anestesiólogos en el sistema público. Pasó mucha agua bajo el puente desde el lunes 4 de abril, cuando por primera vez los especialistas no asistieron a sus lugares de trabajo. En el medio se sancionó y está vigente una ley de emergencia del sector que obliga a estos 63 profesionales a retornar a las tareas en los hospitales estatales.

La resistencia del sector ha continuado mientras las conversaciones para destrabar el conflicto se han mantenido de manera informal diariamente, aun cuando por la norma de emergencia (vigente hace 35 día), debe sesionar por lo menos una vez por mes la "mesa de diálogo", que ha mostrado más las diferencias que alguna coincidencia.

Todo este escenario está montado sobre las más de 5 mil personas que esperan ser operadas en Mendoza, pero que no saben cuándo, porque no hay anestesiólogos que garanticen esas intervenciones quirúrgicas. El problema es el reclamo de mejora de haberes que médicos y médicas de esta especialidad sostienen. 

Por qué no se usa el superávit para aumentarles a los estatales de Mendoza

Una luz al final del túnel  

La crisis mantiene a 5 mil personas esperando ser operadas.

El escenario se completa con la disconformidad extendida a las demás especialidades médicas que intervienen en las cirugías. Sin contar que la crisis se evidencia con otras "fugas", como es la dificultad de encontrar pediatras para el fundamental Hospital Notti.

Las negociaciones no han parado. El Gobierno cuenta sus billetes y ha comenzado a dar alternativas de salida más amplias como es aumentar los ingresos de los integrantes de los equipos de cirugía, no solo a los anestesistas. Se trata del ítem de la productividad, que aparece como una alternativa válida en medio del camino enripiado de la negociación salarial.

Como estrategia, ambas partes acordaron no mostrar la negociación como vidriera, pero sí aceptan que de a poco han ido distendiendo los músculos tensos por la discusión que parecía endurecida por las posiciones inamovibles de Gobierno y profesionales.

Raúl Beguier es uno de los anestesiólogos que participa como negociador. En ese rol le advirtió al POST: "Es correcto (el ofrecimiento del ítem de la productividad). Se recibió una propuesta que se está analizando para poder homologarla e implementarla en todos los hospitales. Al día de hoy continúan trabajando el equipo técnico del Ministerio y los representantes de los anestesiólogos autoconvocados. Sería por módulos horarios para todo el equipo quirúrgico. Ese punto lo está analizando el Ejecutivo".

Campo de batalla

Claudia Iturbe, titular del gremio de los profesionales de la Salud.

Hay que tener en cuenta que en este transcurso ya hay cuatro anestesistas con sumarios por incumplimiento a la ley de emergencia aplicada por el Gobierno. 

En contrapartida, hay un recurso de inconstitucionalidad de parte de AMPROS contra la ley en la Suprema Corte de Justicia (la consideran inaplicable y que roza con el trabajo esclavo). 

Además de un reclamo por parte de los "autoconvocados" ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos por imponer el trabajo forzoso a través de una ley.