En la reunión nocturna entre el gobernador y los intendentes además de los legisladores nacionales Cornejo y Cobos, se analizó qué hacer ante la presunta indiferencia de Fernández al pedido de laudo hecho por Mendoza.
De la respuesta del Presidente dependerá si habrá "plan b" a Portezuelo
Como lo hemos informado, la audiencia que ya pidió formalmente Rodolfo Suarez a Alberto Fernández para analizar la situación del proyecto hidroeléctrico Portezuelo del Viento (PdV) es la prioridad para el gobierno de Mendoza.
Esta situación es potenciada por la actitud del oficialismo mendocino hacia la Casa Rosada. Se ratificó anoche la decisión de no darle ni un ápice de tiempo extra al presidente para que responda al pedido de laudo y que defina el destino de la obra. Eso quedó registrado en la reunión del gobernador con los intendentes oficialistas (solo faltaron el lasherino Daniel Orozco y el lujanino Sebastián Bragagnolo).
No se puso tiempo límite a la espera de la respuesta presidencial al pedido de arbitraje, pero sí se evaluará en base a lo que recabe Suarez de la reunión con Fernández; de esa percepción del gobernador y de los dichos del presidente depende en buena parte el rumbo que tomará el mandatario provincial con PdV o si entrará en consideración un nuevo plan de obras para destinar los 1023 millones de dólares.
Portezuelo: cómo convencer a Fernández de que laude a favor de Mendoza
Necesario brackground
Cornejo, Suarez y Cobos, los tres gobernadores radicales involucrados con Portezuelo.
No hay que olvidar que si hay "plan b" deben ser obras hídricas que contengan producción energética, tal como lo plantea el convenio que firmaron Mauricio Macri y Alfredo Cornejo en junio de 2019 cuando eran presidente y gobernador respectivamente.
Dicho sea de paso el actual senador nacional Cornejo participó del cónclave radical. Estuvo también el diputado nacional Julio Cobos que es el personaje primigenio de esta historia porque junto a Néstor Kirchner acordaron que la indeminización por los perjuicios del régimen de promoción industrial a Mendoza durante la década del '90 sería pagada con la obra hidroléctrica sobre el río Grande en Malargüe. Ahora el proyecto es cuestionado por La Pampa con el guiño implícito de la Nación comandada por Fernández quien fue el jefe de Gabinete de Kirchner en tiempos de aquel acuerdo de 2006.
Pausa por Emir
Hay tensión política entre el gobernador y el presidente.
Anoche en la reunión concretada en la residencia gubernamental de La Puntilla se intentó avanzar en ponerle un deadline a la Nación pensando en que si Portezuelo quedaba trunco debía quedar en evidencia la responsabilidad del presidente de ese fracaso de gestión pública.
Ese es el ánimo que persiste en el núcleo de poder mendocino. Aunque el gobernador cuide las formas y aguarde reunirse con los intendentes peronistas para escucharlos sobre el asunto. La junta aún no se ha realizado porque no podría asistir el sanrafaelino Emir Félix por problemas de salud.
