La semana estuvo marcada por los balances del primer año de gestión del presidente. En el micromundo libertario no se duerme pensando en las elecciones del año próximo. En ese contexto, el ministro de Defensa, el mendocino Petri, parece crecer en la consideración mileista.
Cómo descifrar el "token" electoral de Milei, esa es la cuestión
Claramente, sabemos que por ahí todavía no todos la están pasando bien ,y algunos la están pasando mal. Pero infinitamente menos de como la estaban pasando mal antes. (...). Los abuelos te decían: "Yo quiero que mis nietos no se vayan". Y hoy, todos los que se querían ir se quieren quedar. (...). El año pasado el salario era de 300 dólares. Hoy, el sueldo es de 1.100 dólares. Pensá que teníamos una brecha cambiaria enorme. Hoy la brecha es cero. ¿Y sabes lo que hay? Es confianza. Fijate lo que es el riesgo país. Lo recibimos en 3.000 puntos. Ya lo tenemos en menos de 740 puntos. ¿Y sabes qué es eso? Y nadie le va a decir que no a la Argentina que está cambiando definitivamente. Este es un gobierno que está resolviendo los problemas que tenían décadas sin resolver.
¿Sabes qué crecía con el gobierno anterior? Crecía el empleo público. Crecían los planes sociales. Ya no hay más rehenes de la pobreza. No solo cortamos con la fábrica de generar pobres en la República Argentina, que es la inflación que se generaba por emisión monetaria, sino que echamos a los gerentes de la pobreza que tomaban de rehenes a los que menos tienen y los obligaban a marchar. ¿Y si no marchaban? Les quitaban el plan social. Era vergonzoso. (Luis Petri, ministro de Defensa, en el programa "La noche de Mirtha" anoche, sábado 14).
Ver: El primer año del presidente y el sueño del topo que rompe el Estado
El mendocino es un "argumentador serial" de las bondades del gobierno de Javier Gerardo Milei, a quien defiende políticamente desde su área como principal referente de las Fuerzas Armadas. Petri tiene hiperactividad escénica ante las cámaras y eso se notó anoche ante Mirtha Legrand, que lo tuvo como principal invitado del Ejecutivo nacional en el programa dedicado al primer año de gestión de JGM.
El libreto mileísta, escrito diariamente por el Presidente y su Gabinete, conserva eso mismo que Petri esgrime que es la confianza de la población, en medio de un subibaja que se produjo en septiembre y que luego se recuperó al final del año, llegando a superar los registros de imagen positiva con los que se inició este ciclo, que el miércoles 10 cumplió su primer cuarto.
Aunque cada año de este gobierno cueste mucho vivirlo o sobrevivirlo, para una buena parte de las familias que lo votaron, a Milei hay que observarlo en su desarrollo como presidente, y como tal ya cumplió un 25 por ciento. Dicho sea de paso, de acuerdo con el monitoreo que realizó la organización Chequeado, la mitad de las promesas de campaña se han cumplido en este primer año de gestión.
También hay que dejar de especular que Milei no va a terminar su periodo de gobierno, porque las próximas elecciones legislativas lo reimpulsarán para seguir aplicando las reformas macroeconómicas que son su principal sostén. Será así mientras él mismo siga atizando la idea de la necesidad de que es él quien hace falta para este tiempo, un tiempo seco y caliente como el zonda que heredó, pero que él mismo tiñe más intensamente con su personalidad agresiva.
Es un escenario que por ahora está montado para un unipersonal presidencial. La ciudadanía paga la entrada para verlo por las redes sociales en su mayoría, y es un público que ha sabido fidelizar. Pero ha entendido que este esquema se puede tornar precario si el dolor que produce la motosierra no cesa y no hay tutia (ungüento cicatrizante) para esas amputaciones. Por ahora, la caída de la inflación y las desregulaciones de Federico Sturzenegger cumplen esa función restituyente,que no es poco para quienes sienten el agobio diario del Estado en cada servicio.
La necesaria Cristina
Ha comprendido Milei que por lo menos para el año próximo tiene que tener una contrafigura de peso como CFK, que por polarización le permita lograr la máxima cantidad de votos para canjearla por un número proporcional de bancas legislativas, y así encarar la segunda parte de la gestión con manos parlamentarias propias.
En estas circunstancias, Milei ha dado sus pasos dejando la huella marcada que necesita de la expresidenta para competir con ella mano a mano en el debate público y en las urnas el año próximo. Por eso se cayó el proyecto de Ficha Limpia, para no quedarse sin Cristina como candidata.
Ese devenir le va marcando el rumbo y encuentra rivales muletos como Victoria Villarruel para avanzar al 2025. La apuntó a la vicepresidenta de haber incurrido en una inconstitucionalidad por presidir el Senado mientras él estaba fuera del país. Fue en la candente sesión donde se expulsó al senador Edgardo Kueider (kirchnerista, pero con "peluca"), preso en Paraguay por contrabandear dólares.
La polémica la instaló el mismo presidente desde Italia, donde aún se encuentra de gira oficial. Milei desautorizó a Villarruel y la vice quedó otra vez en offside política y jurídicamente, al violentar la Carta Magna. De este modo, Milei defendió a un aliado como Kueider e intentó que el peronismo no sume a una senadora de La Cámpora.
Preocupa Francos y Petri se posiciona
Mientras tanto, Petri ha ido remontando su perfil para llamar la atención de los hermanos Milei, Karina y Javier, que observan todo desde el mangrullo de La Rosada junto a Santiago Caputo.
Desde esos ámbito existe una preocupación, que es la salud de Guillermo Francos, el jefe de Gabinete y quien conserva la cartera de Interior. Esa mirada atenta a la salud de Francos hace suponer un eventual reemplazo en ese espacio estratégico.
Con esa descripción, desde los grupos petristas se ilusionan con un "Luis jefe de Gabinete", y la aparición del ministro de Defensa en el programa de Mirtha afianzó esa expectativa. De esto se habló informalmente anoche en el agasajo de fin de año en la Quinta Sección en la sede de la Fundación Argentinos por el Futuro (nótese que cambió el nombre: antes era Mendocinos por el Futuro).
"Hackear el token" de Milei, ¿cómo?
¿Dónde está la oposición? Es una consulta que se hacen en La Libertad Avanza para detectar el enemigo a vencer en las elecciones del 25. El problema es que la batalla parece estar por fuera de las estructuras partidarias.
Un atisbo, un indicio, para encontrar una respuesta en esta convulsionada realidad filtrada por medios y redes sociales fue el impensado descargo político que hizo la popular Florencia de la V que el lunes 9 anunció al cierre del programa Intrusos que dejaba la conducción de ese envío porque el canal América del multiempresario Daniel Vila había decidido sacarle ese protagonismo y se comprometió a reubicarla en otro espacio de la empresa mediática.
Lo llamativo fue cómo se despidió la conductora de su audiencia. Tuvo un alto contenido político en ese mensaje, dejando margen para inferir que su salida podría ser más allá de un motivo de estrategia televisiva. Quizá por eso cobra cuerpo la teoría de que la oposición política tradicional, la oposición partidaria, está en retirada porque no tiene la capacidad de obtener la clave para entrarle electoralmente a un outsider de la política como lo es Milei. O sea, "la casta" no conoce el token del presidente que le permite estar tranquilo, siendo consciente de su predominio en la política argentina.
Lean con atención lo que dijo De la V (otra outsider) para demostrar que, desde el pensamiento, es una exponente pública de la oposición al libertarismo anarquista, como en su momento lo fue Lali Expósito.
Creo en una Argentina, creo en una sociedad más justa, más diversa, más inclusiva, siempre voy a estar del lado de los pobres, siempre voy a estar del lado de los maestros, siempre voy a estar del lado de los estudiantes, siempre voy a estar del lado de los jubilados, siempre, porque creo en un país libre, de verdad, por eso ¡viva la diferencia, vivan los putos, vivan las trabas y viva Perón!