Milei, la mentira de las jubilaciones y la verdad de la papa frita

Un enigmático episodio sorprende al Presidente. Una acción para transparentar otra acción poco transparente. Jubilaciones, inflación y la fibra íntima de los secretos personales.

Milei, la mentira de las jubilaciones y la verdad de la papa frita

Por:Florencia Silva
Secretaria de redacción

 Los mastines Milton, Murray, Robert y Lucas, bajo las órdenes de Conan "las fuerzas del cielo", conducen al Presidente en el entrevero que marca la agenda política. Mientras tanto, luego del éxito de la Casta de Gran Engaño, buscan nuevos formatos, aunque la realidad no les da respiro.

Los vidrios crujieron con el último trueno. La tormenta de Santa Rosa intimidaba, el ruido de la lluvia sobre el techo era un murmullo inquieto y de repente, no hubo más luz, justo cuando Toto Caputo le cortaba las puntas del pelo al Presidente, aprovechando el refrán que dice que en esa fecha el cabello crece más fuerte. 

Robert buscó velas para apaciguar la penumbra y cuando la encendió, los cuatros muchachos de la nueva SIDE habían irrumpido en la escena, silenciosos como gatos. Sergio Neiffert, el "Señor 5" iba a ser interrogado días después por la Comisión Bicameral de Inteligencia en el Congreso y necesitaban armar una buena coartada para explicar que había hecho con los 100 millones de los fondos reservados que les habían dado por DNU y que, según decían, ya se habían gastado el 80%. 

El "señor 5" había invertido en un polígrafo y era su coartada para salir más o menos ileso del cónclave con Lousteau que presidía la Bicameral de Inteligencia. Neiffert, Cecati, Colombo y Waissbein vestían sobretodo gris y sombrero de ala caída que les tapaba la mitad del rostro. Un relámpago hizo brillar las perillas de aluminio del "detector de mentiras".

"Tenemos órdenes de hacer algunas preguntas", dijeron a coro, con voz grave, mientras Colombo filmaba la escena. Conan estaba irascible, le irritaba la situación pero sabía que ese DNU tenía su firma así que solo se limitó a asentir con la cabeza mientras le colocaban los electrodos en el cuerpo al Presidente. A continuación, la secuencia.

- ¿La inflación se está derrumbando?

-¡Verdadero!

El botón rojo que delata la mentira, se encendió. Toto Caputo había chapeado allá por abril que la inflación caía un 5% aunque finalmente fue de 8%. Ya en la última semana de agosto se le escuchó decir en los pasillos que el impacto de la caída de los precios "iba a tardar en llegar a la gente". Dos meses antes también había hecho alarde diciendo que se terminaban las tasas de interés por debajo de la inflación, pero al día de hoy no hay bancos ni billeteras que se lo ofrezcan a sus clientes.

Ver: El PRO ratificó su apoyo a que Milei vete la nueva fórmula jubilatoria

- ¿Las jubilaciones le ganarán a la inflación?

¡Verdadero!

La luz roja de la mentira, prendida. Otra vez Toto yéndose de boca, había dicho en el mes de junio que en los últimos seis meses las jubilaciones "habían subido un 4% real". Ni sus aliados le creyeron. Esta semana en el Senado, el PRO votó una ley para aumentarles el 7,2% y compensar, aunque sea un poquito, el brusco 20,6% de inflación en enero. 

El Presidente se sacudió furioso, quiso sacarse los electrodos, avisó que iba a vetar esa Ley y de paso, iba a repartir unos spray de gas pimienta entre los abuelos, para combatir la alergia estacional, típica en esta época del año. Conan lo fulminó con la mirada y le indicó que se quedara quieto. Es que sabía que tenían las de perder.

Veto y palos a los jubilados.

Según expertos en Seguridad Social de la Universidad de General Sarmiento, en Argentina hay 7,5 millones de jubilados y más de 3 millones cobran la mínima. De esa cifra, los que cobraban bonos de ANSES y recibían remedios de PAMI perdieron el 28,3% de su poder adquisitivo en comparación a noviembre de 2023. Después, de los 2 millones de jubilados que perciben la mínima y el bono de ANSES, hoy compran un 21% menos. Desde Macri a la fecha, los viejos cobran, en términos reales, la mitad de lo que cobraban en 2015.

- ¿Le gustaría cenar esta noche milanesas con papas fritas?

- ¡Falso!, ¡falso!, ¡falso! 

El botón verde de la verdad se prendió por primera vez. Los mastines estaban estupefactos. El Presidente se sacudía y gritaba entrecortado, con la boca llena de espuma. Karina irrumpió en la escena, le arrancó los electrodos y se llevó a su hermano que estaba sacado. No sin antes escupirle a Conan en la cara que se le había ido la mano.

La pregunta sobre las papas fritas englobaba un mensaje incómodo. Era parte de la intimidad del Presidente. Resulta que durante la campaña, habían organizado una cena para 50 personas en una parrilla de Las Cañitas. En la punta de la mesa estaba el Presidente y al lado, Guillermo Francos. Había 15 mozos atendiendo a los comensales y de repente, aparecen todos ellos con platos con papas fritas para servir.

Al ver la situación, el Presidente se paró de un salto y con los brazos en alto empezó a gritar enloquecido "¡No, papas fritas no!", ante la mirada asustada de los mozos. Karina se paró y ordenó que se las llevaran

Los testigos dicen que antes de que se fueran, Guillermo Francos tomó a uno de los empleados del lugar del brazo, sacó un puñado de papas y se las puso en su plato, una acción que casi lo deja afuera de la posterior jefatura de Gabinete.

Conan entendió el mensaje a la perfección. Los espías hicieron los deberes. Iban a justificar ante Lousteau y la Comisión Bicameral de Inteligencia que usaron el 80% de los 100 millones asignados por DNU para comprar un polígrafo y contribuir a la transparencia del Ejecutivo Nacional. Pero ojito, no vaya a ser que a posteriori se pusieran mañosos con ellos, porque siempre pero siempre, hay que guardar una papa frita bajo la manga.

Continuará ...

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