El Presidente calificó de "degenerados fiscales" a los diputados que aprobaron la reforma jubilatoria. "Mi palabra no se negocia", sostuvo, y ratificó que vetará completamente la ley aprobada este jueves.
Milei aseguró que en su gestión "las jubilaciones le ganaron a la inflación"
El presidente Javier Milei pidió este viernes "mirar a los kirchneristas" para saber "quiénes han arruinado a los jubilados", al acusar a la gestión de ese espacio de haber cometido la "irresponsabilidad" de haber "jubilado a personas sin aportes".
El mandatario también recordó desde Rosario que la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner también "vetó el 82 por ciento móvil" de las jubilaciones en 2010, por lo que, dijo, "no resiste el archivo".
Milei participó del 140° aniversario de la Bolsa de Comercio de Rosario. "Tenía otro discurso, pero como en la Argentina pasan cosas tuve que modificarlo", comenzó, visiblemente enojado.
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"Hace dos meses dije que si los degenerados fiscales quieren romperme el programa económico, lo voy a vetar. Ayer los degenerados fiscales votaron en gran mayoría un disparate que implica un 62% del PBI de toma de deuda. Frente a semejante acto de irresponsabilidad, populismo y demagogia no me queda otra que cambiar el discurso y venir a contarles", insistió Milei.
Durante su alocución, confirmó que va a vetar la nueva movilidad jubilatoria aprobada este jueves por el Congreso: "Mi palabra no se negocia, no le voy a dejar pasar un milímetro a los degenerados fiscales".
Luego, aseguró que su Gobierno mejoró el poder adquisitivo de los jubilados. "Lo primero que hay que tener en cuenta es la mentira sobre la que se apalancaron los diputados y senadores. Durante el vergonzoso gobierno K, las jubilaciones terminaron 30% abajo. Desde que nosotros llegamos al poder, la jubilaciones están un 5 por ciento arriba. Le ganaron a la inflación".
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Milei destacó que la "performance" fiscal del Gobierno es "la mejor de la historia argentina" y dijo que el aumento aprobado a los jubilados busca "rompernos la política fiscal. Porque si sale bien, se les acabó el curro".
El Presidente también se animó a arriesgar una rara cifra del costo que tiene, según él, la reforma jubilatoria: "El costo fiscal de la medida, el chiste de ayer, esa bestialidad propia de brutos, nos costó 370 mil millones de dólares. ¿Acaso ustedes pretendían que no vetará semejante disparate?".