Los "puentes" de Francos por donde pasan Milei y Cornejo

"Francos es el hombre con más vuelo y manejo político del Gobierno, es el que controló la relación con los gobernadores desde el Ministerio del Interior. Le viene bien a Mendoza tener a alguien con quien articular las decisiones políticas que tiene que tomar el Gobierno nacional. Le dará fortaleza al gobierno de Milei en el debate parlamentario, pero también mucha más fortaleza en la gestión de las relaciones con los gobernadores" (Andrés "Peti" Lombardi, presidente de la Cámara de Diputados de Mendoza).

Todo es a pedir de Guillermo Francos el nuevo jefe de Gabinete que reemplaza al distante Nicolás Posse en ese cargo. Francos llega a ese despacho en una etapa de incipientes descalabros del gobierno central, en la gestión y administración de los servicios, como la provisión del gas y de los bienes estatales con fines específicos como son los alimentos para la asistencia social.

El llamado "fenómeno barrial" de Javier Gerardo Milei toma cuerpo internacional y se va configurando un escenario excéntrico donde se delimitan las realidades bien antagónicas de un país en constante metamorfosis.

Ver: Los juegos del hambre, la comida que se vence y las "Barbaritas" que aún lloran

La foto interior expone las carencias que comienzan a verse por la crisis socioeconómica que resurge por la caída del empleo y la recesión que se acentúa. Ya se ven escenas de comedores populares sin comida para una demanda que crece día a día y que no es satisfecha. Se retuvieron alimentos perecederos, y se liberaron por una denuncia de la Iglesia Católica. 

El presidente priorizó el desenmascaramiento de las organizaciones piqueteras, encargadas de distribuir mercaderías adquiridas por el Estado para los barrios más populosos. Los dirigentes piqueteros son enemigos públicos de Milei, y están sospechados de abusar de los fondos públicos que manejaban (subsidios) malversándolos para financiar sus organizaciones y a ellos mismos.

También desde dentro se ve a un presidente cada vez más itinerante, el que más ha viajado afuera del país en un periodo de seis meses desde 1983. Se ha subido al avión ocho veces y cinco de las cuales a viajado a Estados Unidos y el viernes 21 de este mes tiene previsto visitar a Emmanuel Macron, el presidente francés.

Por fuera observan a un país con un presidente vistoso, un caso exótico. Un experimento, una experiencia inédita de un anarcocapitalista en el poder que desdeña los modelos políticos partidarios tradicionales y se vincula con líderes de la ultraderecha y de las corporaciones tecnológicas generando un esquema político-empresarial que borronea las fronteras de los países. Es como si de a poco nos vamos a acercando a lo que imaginabamos como la distopía.

Por eso, un colaborador del presidente estando en Estados Unidos resopló aliviado al ver la foto de quienes integran el gabinete nacional desayunando en un café porteño con el nuevo jefe de gabinete. "Guillermo (Francos) es la mejor forma de tender un puente entre el mundo de nuestra visión libertaria y el de la política. Y lo que permite llevar una transición más ordenada, algo que (Nicolás) Posse no tenía", dijo el libertario mientras compartía la imagen viralizada por el vocero de la Presidencia.

Por qué yo

"El presidente, me elige a mí porque se da cuenta que con la política argentina a él se le hace complicado, porque no le entiende, porque tiene diferencias por equis motivos y yo tengo una posibilidad mayor de dialogar y de ahí viene mi propuesta. (...) La realidad es que el presidente tiene una visión de la política, la cuestiona, el quisiera que cambie, pero también es cierto que tiene la sagacidad de ver que no se puede conversar con la política sin alguien que sea capaz de dialogar y ese es el rol que él me ha asignado" (Guillermo Francos explicando su designación como jefe de gabinete).

  Con este panorama bien descripto hay que entender que Francos escaló en consideración en el olimpo libertario en este primer semestre de gobierno, porque en medio de la furia presidencial del verano cuando fracasó el primer intento de sacar las leyes, Bases y Paquete Fiscal, su figura se desdibujó por las irrupciones de Milei que se amotinaba desde las redes sociales contra legisladores y gobernadores. Se llegó a especular que Francos terminaría fuera del gobierno por su aparente infructuosa incidencia en el Congreso.  

Hasta que Milei, de acuerdo a sus propias acciones, apretó el acelerador con lo que tenía y mientras maldecía a "la política" se apoyó en su ministro de Economía, Luis Toto Caputo y aplicó motosierra y licuadora. Así logró los índices que buscaba de la macroeconomía: déficit cero y superávits, fiscal y financiero, además de una inflación en baja.

Esto también conllevó el espiral recesivo que padecemos, pero esos resultados de la macro, positivos para el objetivo del economista presidente, calmaron esa ira que lo tomó ("porque no entiende a la política", diría Francos). Entonces le dio espacio a la negociación política y la encontró en su ministro del Interior, que pacientemente recorrió las provincias intentando convencer a los gobernadores, y logrando tejer ese tramado que cerrara con los votos en el Parlamento.

Es decir, después de habitar la Casa Rosada 175 días, Milei entendió que alguien como Francos, que asumirá formalmente mañana lunes 3 a las 20:00 como jefe de Gabinete, debe ser quien lleve adelante esta transición entre la antigua dirigencia y la que él pretende construir.

Cornejo en el mapa

En este escenario se mueve Alfredo Cornejo y la población mendocina que gobierna en este segundo periodo de gestión. La primera (2015-2019) le tocó con un gobierno nacional pretendidamente liberal de Mauricio Macri. En este segundo momento lo hace en un proceso de descomposición política y social impulsado por el libertario, apoyado en el voto popular, donde Cornejo es parte de la dirigencia histórica que Milei rechaza.

Por eso, la ascensión de Francos en la cúspide del equipo presidencial es una buena noticia para el mandatario local porque el ahora ministro coordinador supo tender puentes con Cornejo y negociaron gestión de gobierno nacional por apoyo legislativo. Cornejo tuvo alguien en una mesa de tratativas para acceder a instancias necesarias como la reactivación de las obras públicas nacionales y la rectificación del texto inicial del Fondo de los 1023 millones de dólares, originalmente destinados a la fallida hidroeléctrica Portezuelo del Viento. O participar de un pedido colectivo con el resto de los gobernadores, como es la restitución del Impuesto a las Ganancias, ahora conocido como Impuesto a los Ingresos Personales.

"Francos es una de las figuras más fuertes del gobierno nacional y con quien hemos tenido más contacto. Donde esté mientras su cargo sea de relevancia es bueno para la gestión mendocina", confiaron al Post el lunes 27 de mayo desde Casa Gobierno, ni bien trascendió la noticia de la salida de Posse y el desembarco de Francos en la coordinación del gabinete.

Hay circunstancias que corroboran estas relaciones que van reacomodando las piezas que se inmovilizaron a causa de las primeras medidas severas tomadas por la versión furiosa de Milei. Se logró lanzar la licitación del tramo final de la remodelación de la provincial ruta 82 y de acuerdo a lo trascendido al Post desde Vialidad Nacional, las obras nacionales que no están frenadas son: Variante Palmira y Doble vía a San Juan. En realidad siguen a bajo ritmo, pero no han parado, aclararon. Las demás obras que dependen de ese organismo nacional en Mendoza siguen "neutralizadas". 

En la interna del radicalismo mendocino la figura de Francos también influye. Los informantes aseguran que la relación de Cornejo-Francos lo empodera más aún al gobernador ante el empuje y la ambición del actual ministro de Defensa, Luis Petri que no descuida el frente interno con su intención intacta de convertirse en candidato oficialista a la gobernación en 2027. Una aspiración que también se advierte en el intendente capitalino Ulpiano Suarez. Ambos dirigentes son exógenos al cornejismo y las mismas fuentes garantizan que el jefe de Estado provincial ha enviado mensajes a ambo sectores para establecer un receso a los tempranos posicionamientos electorales (en especial de Petri), haciendo valer su renovado vínculo de llegada a la Casa Rosada a través de Francos.   

Francos y sus puentes con Milei

Francos y Milei son amigos de los tiempos en que ambos eran contratados por la Corporación América de Eduardo Eunekián (Milei también tuvo una relación cercana en esa época de trabajo privado con el kirchnerista Rafael Bielsa). Fue el dirigente de raíz de centroderecha, uno de los que alentaron al actual presidente que se hiciera escuchar porque tenía capacidad para argumentar sus ideas anarcocapitalistas y pensamiento de aplicación minarquista.

Francos comenzó su vida política por los lejanos '70 secundando de joven a Francisco Paco Manrique (creador del PRODE), quien fuera ministro de Bienestar Social de la dictadura de Alejandro Lanusse. Lo siguió en esa actividad partidaria como afiliado del Partido Federal desde el inicio de la actual etapa democrática y en ese recorrido enlazó amistad con el actual presidente del Partido Demócrata a nivel nacional, el mendocino Carlos Balter, también hoy integrante del directorio del Banco Nación.

Precisamente esa relación tuvo un capítulo mendocino con un emprendimiento privado, una fábrica de tapones sintéticos para envases de vino donde Francos y Balter fueron socios.

"'Conozco alguien que sabe de números y nos puede ayudar: se llama Javier Milei", dijo Guillermo Francos , con su socio, el dirigente mendocino Carlos Balter, del otro lado del teléfono", consigna un informe del diario La Nación del martes 28 de mayo. El recordatorio de la publicación porteña es a propósito del nivel de confianza que ya tenía hace 15 años Francos con Milei, quien en esa oportunidad se encargó de hacer un estudio económico sobre la empresa que los socios habían decidido vender.

Francos y Milei también compartieron espacios políticos en los inicios de la campaña de como candidato a presidente de Daniel Scioli. Milei, poco conocido en 2013, generó varios documentos económicos desde la fundación Acordar, que colaboraba con argumentos de campaña con el actual secretario de Turismo de la Nación. En 2014 esa fundación financió el primer libro de Milei que compartió autoría con Diego Giacomini y Federico Ferrelli Mazza, titulado Política Económica Contrarreloj. En ese tiempo se lo veía al actual presidente participar de los actos proselitistas de Scioli.

Siendo Francos, delegado en el BID del gobierno de Alberto Fernández (había llegado allí a instancias de su amigo Gustavo Beliz), ya alentaba a Milei para que saltara a la arena política, dicen las reseñas sobre la relación entre ambos. Y una vez ya dispuesto Milei a emprender su camino como candidato a presidente, le llamó a Francos para invitarlo a ser su canciller si terminaba electo.

En una entrevista en octubre del año pasado con Luis Novaresio Francos detalló aquel episodio del ofrecimiento de Milei a ser su ministro de Relaciones Exteriores y en ese mismo comentario aseguró que le respondió al líder libertario: "Te acompaño donde quieras, ser canciller o lo que sea". Dicho y hecho.