La estadística oficial revela que el transporte ilegal de personas ha crecido, pero también han aumentando los controles. Un fenómeno que crece al ritmo de la crisis. Qué elige el usuario.
Por qué en Mendoza se secuestran 3 taxis truchos por día
Las crisis económicas argentinas tienen distintas intensidades de acuerdo al nivel de condicionamiento a la vida cotidiana. En este trayecto que atravesamos, la inflación ha generado más pobreza y ese efecto alcanza al 40 por ciento de la población. Por supuesto que Mendoza padece esta situación. Lo notable es que la inflación produce un fenómeno difícil de asimilar: hay personas y familias con ingresos regulares, es decir con empleo registrado que son parte de esa pobreza "inflacionaria".
Esta consideración es útil como introducción a este informe y como contexto para entender lo que ocurre con los servicios de transporte de personas en estos tiempos contradictorios y acuciantes. Como síntoma socioeconómico quienes habitamos este país demandamos cada vez más coberturas básicas y la misma escasez de recursos, nos hace transitar la informalidad en casi todas las actividades.
Por eso nos enfocamos en el modo, o los modos que tenemos de trasladarlos a nuestros destinos diariamente en busca del sustento, principalmente. Una medición del Ente de Movilidad Provincial (EMOP) y los registros de la acción de control de este mismo organismo oficial dan pistas certeras. Veamos.
Por un lado, las personas cada vez más ocupan el servicio de transporte colectivo, o sea los micros, es decir que dejan de usar sus vehículos particulares por los altos costos de los combustibles; y por otro, aumenta la actividad ilegal de autos particulares convertidos en taxis sin ningún tipo de autorización, es decir cada vez hay más taxis truchos.
El presidente del EMOP, Carlos Teves (ex legislador e histórico dirigente radical), reveló estos detalles en una entrevista con el POST. Y en esa descripción llamó la atención el dato: "por día se secuestran de uno a tres vehículos por trasladar personas sin ninguna autorización ni garantía de seguridad para los pasajeros".
Quizá esta última actividad marginal se ponga en evidencia también por la eficiencia mejorada de inspeccionar y sancionar del EMOP, un organismo que tiene cuatro años de funcionamiento y optimizó este aspecto aprovechando el bache que produjo la restricción de actividades que impuso la pandemia. En ese periodo planificó, capacitó y equipó a su personal para esta tarea de control del transporte de personas.
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Esto ha hecho que se detecten más vehículos haciendo de "transporte de interés público individual" (es la denominación en las que se engloba a taxis, remises y aplicaciones) de manera clandestina.
Dónde están los taxis truchos
• Playa de secuestro. El EMOP también tuvo que ampliar su capacidad de contener los autos secuestrados en los operativos de control. Por eso cuenta Teves que hay espacios dedicados como playas de secuestros del organismo para no depender de los lugares destinados a igual fin pero que dependen del área de Tránsito de la Provincia o los municipios. De esa descripción es que se desprende estadística promedio de la captura de hasta tres autos por día dedicarse ilegalmente a transportar pasajeros.
• Las multas. La Ley 9086 de Movilidad establece que para recuperar un auto secuestrado ocupado como remis trucho hay pagar un cargo total de 238 mil pesos por vehículo. En ese monto se incluye la multa y el recargo por el espacio ocupado en el estacionamiento estatal.
• A remate. De acuerdo a las planillas oficiales hay unos 200 autos retenidos y en un corto plazo el EMOP pondrá en manos de la Justicia de Paz 9 autos para que sean rematados porque han permanecido en las playas más de seis meses sin que sean reclamados.
La preferencia y la escasez
Quienes demandan el servicio de transporte individual siguen eligiendo el taxi tradicional por encima de remises y aplicaciones en un 95 por ciento según un estudio encargado por el EMOP.
Esto se debe por la mayor visibilidad y disponibilidad que tienen estos coches en la vía pública y en los horarios, respecto de los remises y aplicaciones.
Pero sobre esas ventajas que tienen los taxis clásicos y legales, crecen los ilegales porque se mueven por las zonas suburbanas de los conglomerados y son parte del paisaje de esos vecindarios que no ven la competencia desleal sino la conveniencia en los precios de un viaje "hacia el centro".