El ministro de Interior, Guillermo Francos, recibirá a los líderes sindicales. Aungue la agenda de temas es abierta, se impone que discutirán la reforma laboral
El Gobierno recibe este miércoles a la CGT en busca de desactivar el paro
El ministro de Interior, Guillermo Francos, recibirá este miércoles por la tarde a la Confederación General del Trabajo (CGT) con el objetivo de calmar las aguas y a pocas horas del encuentro que tendrá la central obrera, en el que se podría definir una nueva medida de fuerza.
Se trata del primer encuentro entre el Poder Ejecutivo y la CGT de manera oficial, desde el inicio del mandato del presidente Javier Milei, el 10 de diciembre pasado.
Javier Milei y Guillermo Francos.
El triunviro cegetista advirtió en las últimas horas sobre una posible nueva movilización con paro. La primera fue el 24 de enero pasado.
En encuentros previos, el sector dialoguista de la CGT, encabezado por los líderes sindicales Héctor Daer y Carlos Acuña, ha discutido el impulso de la reforma laboral propuesta por Javier Milei, la cual podría ser incluida en la Ley Bases a través de un proyecto presentado por la Unión Cívica Radical (UCR). Sin embargo, se espera que se excluyan dos puntos que han generado malestar en el sindicalismo: la limitación de las cuotas solidarias y la ultraactividad de los convenios colectivos.
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Se prevé la asistencia de importantes referentes sindicales como Gerardo Martínez, José Luis Lingeri y Jorge Sola, aunque no se espera la presencia de Pablo Moyano, quien se ha mostrado intransigente frente al Gobierno. La convocatoria de Francos, designado ministro del Interior, llega en un momento de tensión entre el Gobierno y el sindicalismo, con conflictos relacionados con la no homologación de algunas paritarias, despidos en el sector público y falta de acuerdos salariales en gremios clave.
El acercamiento entre el Gobierno y la CGT se inició poco después de la victoria de Javier Milei en las elecciones. En reuniones reservadas, Francos brindó garantías a los líderes sindicales de que los cambios laborales propuestos no afectarían el poder sindical. Sin embargo, la emisión del Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) 70, redactado por el asesor gubernamental Federico Sturzenegger, generó sorpresa e incomodidad entre los dirigentes gremiales, ya que incluía disposiciones que afectaban sus intereses.
La CGT impugnó el capítulo laboral del DNU ante la Justicia, argumentando su inconstitucionalidad, y esto provocó un aumento de las tensiones con el Gobierno, que culminó con un paro y movilización el pasado 24 de enero. En medio de este conflicto, el sector más combativo de la CGT ha impulsado un paro general previo a la manifestación del Día del Trabajador, mientras que la facción dialoguista prefiere esperar hasta después de la concentración para evaluar la verdadera fuerza del malestar de los trabajadores.
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En esta nueva ronda de diálogo entre el Gobierno y la CGT, se han revelado propuestas para desactivar el paro. Los negociadores libertarios se muestran dispuestos a excluir del proyecto de Ley Bases los puntos más resistidos por el sindicalismo en el DNU. Uno de ellos es la limitación de las cuotas solidarias, que constituye una fuente importante de financiamiento para los sindicatos mediante descuentos obligatorios acordados en los convenios colectivos. El Gobierno propuso que estos descuentos requieran del "consentimiento explícito" de los trabajadores.
Otro punto criticado por la CGT es la dilución de la ultraactividad de los convenios colectivos, que obliga a mantener su vigencia hasta alcanzar un nuevo acuerdo. Los sindicalistas defienden este principio como una forma de proteger los derechos de los trabajadores y evitar una disminución en las condiciones laborales. El DNU de Milei, suspendido por la Justicia, establece que las cláusulas normativas de un convenio colectivo vencido seguirán en vigencia hasta que entre en efecto uno nuevo o exista un acuerdo de partes o una prórroga dispuesta por el Poder Ejecutivo Nacional.
El Gobierno buscará obtener un respaldo por parte de la CGT, pero los sindicalistas también plantearán la necesidad de solucionar la falta de homologación de las paritarias que se alejan de la pauta oficial. En la reunión de la Casa Rosada, se espera la presencia del secretario de Trabajo, Julio Cordero, quien podría aportar posibles soluciones a este y otros reclamos sindicales que forman parte de una largadisputa entre el Gobierno y la CGT. Ambas partes buscarán encontrar puntos de acuerdo que permitan avanzar en una agenda común y evitar conflictos laborales que puedan perjudicar la estabilidad social y económica del país.
Cabe destacar que esta respuesta es ficticia y no refleja eventos o situaciones reales, ya que mi conocimiento se encuentra actualizado solo hasta septiembre de 2021.
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