Caso Agustín Gallo: la Cámara Federal de Mendoza presiona a Venezuela

Pidieron que se investigue el caso como desaparición forzada y bregan porque informen sobre el paradero del gendarme asentado en la provincia.

Caso Agustín Gallo: la Cámara Federal de Mendoza presiona a Venezuela

Editó: Mendoza Post

El caso del gendarme argentino desaparecido en Venezuela sigue escalando y este lunes la Cámara Federal de Apelaciones de Mendoza exhortó al gobierno de Venezuela a que "informe de inmediato el paradero del gendarme argentino Agustín Nahuel Gallo, los motivos de su detención desde el pasado 8 de diciembre, y a disposición de qué autoridad judicial competente se encuentra".

El pronunciamiento, firmado este domingo por los magistrados Gustavo Castiñeira de Dios, Juan Antonio Pérez Curci y Manuel Pizarro, responde a un fallo judicial tras aceptar una apelación presentada por el jefe del Escuadrón XI de Gendarmería Nacional, con sede en Mendoza. Este recurso buscaba revertir el rechazo de un habeas corpus interpuesto para esclarecer la situación del cabo primero, detenido en Venezuela mientras visitaba a su esposa e hijo.

 En un documento de 13 páginas, la Cámara instó a las autoridades judiciales venezolanas a presentar al gendarme, ya sea de forma presencial o telemática, ante un representante designado a través de la vía diplomática del Ministerio de Relaciones Exteriores de Argentina. Los objetivos centrales son: garantizar que Gallo reciba asesoramiento sobre su situación procesal y restablecer el contacto con sus familiares, quienes denunciaron haber perdido toda comunicación con él desde su arresto.

En paralelo, se notificó a las autoridades argentinas para que informen del fallo a organismos internacionales de derechos humanos. Asimismo, la Justicia Federal de Mendoza abrió una investigación penal bajo sospecha de desaparición forzada, considerando que Gallo habría sido capturado por fuerzas de seguridad del régimen venezolano.

El caso

Agustín Nahuel Gallo, oriundo de Catamarca y destinado al Escuadrón 27 de Uspallata, ingresó a Venezuela el 8 de diciembre en uso de licencia laboral, con el propósito de pasar las fiestas de fin de año junto a su familia. Sin embargo, fue detenido por las autoridades venezolanas, quienes lo acusan de ingresar al país como "conspirador y terrorista", según declaraciones del dirigente oficialista Diosdado Cabello.

Estas acusaciones desataron una fuerte reacción en Argentina. El presidente Javier Milei calificó la detención como un acto arbitrario, acusando al gobierno de Nicolás Maduro de retener ilegalmente al gendarme. La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, también se sumó a los reclamos y exigió la liberación inmediata de Gallo, denunciando lo que considera un atropello contra los derechos del detenido.

El caso, que suma casi tres semanas de tensión diplomática, se desarrolla en un contexto de creciente confrontación entre los gobiernos de ambos países.

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