De casualidad, se descubrió un fraude millonario vinculado a Enlazados, el programa laboral del Gobierno de Mendoza. La semana pasada echaron a una administrativa y la Justicia podría imputar a 32 personas.
Así "desaparecieron" $26 millones del Ministerio de Producción de Mendoza
Una empleada administrativa del Gobierno de Mendoza fue despedida la semana pasada y enfrenta una denuncia penal por su participación en un fraude millonario, que fue posible al tener intervención directa en la base de datos de "Enlazados", creado para impulsar oportunidades de empleo. Con la ayuda de 31 cómplices ajenos al Estado, armó un plan para quedarse con millones de pesos del programa laboral que depende del Ministerio de Producción, y así lo logró durante 4 meses, desviando alrededor de $26 millones en ese lapso, sin ser detectada por ningún funcionario responsable.
Todo se desencadenó la semana pasada, pero desde el Ministerio de Producción no hicieron público el caso. Según reconstruyó el Post, la empleada despedida, que sería el "cerebro" de este fraude al Estado, es Valentina Cáceres, una joven de apenas 20 años que ingresó como administrativa del programa Enlazados a comienzos de 2023. El martes 30 de abril, con escribano público, le comunicaron el despido y testigos de la situación manifestaron que la mujer no mostró signos de sorpresa ni resistió la medida que habían tomado en su contra.
Entre los 31 cómplices que facilitaron el desvío de unos $26 millones está el novio de Cáceres, Germán Valdeolmillos, de tan sólo 19 años, quien también se desempeñó en Enlazados, aunque habría renunciado antes de que se detectara la maniobra. Sobre esto último, una fuente extraoficial contó a este diario que la punta del ovillo fue un par de transferencias bancarias entre Cáceres y Valdeolmillos, por varios millones de pesos. Esos movimientos habrían sido "observados" por los bancos y AFIP, por lo que se habría indagado en los empleadores. Según esta teoría, fue así que el Ministerio de Producción puso la lupa sobre Cáceres y descubrió el fraude.
Con esta información, se consultó al Ministerio de Producción de Mendoza sobre lo sucedido, y la responsable del programa Enlazado, Emilce Vega Espinoza, confirmó el fraude y el despido de una empleada administrativa a la que evitó identificar. Sin embargo, negó que las alarmas hayan "saltado" por el lado de la AFIP y afirmó que fueron los controles internos los que permitieron detectar la estafa. Asimismo, confirmó que "seguramente en las próximas horas" la Dirección de Asuntos Jurídicos hará una denuncia penal ante la Fiscalía de Delitos Económicos.
Paso a paso: cómo desviaron $26 millones
Para comprender cómo se desviaron $26 millones, primero hay que entender cómo funciona el programa Enlazados. Básicamente, a través de este programa, el Gobierno colabora con las empresas que cumplen con ciertos requisitos pagando parte del sueldo de empleados nuevos durante 4 meses. Esa ayuda, que equivale al salario mínimo vital y móvil, va directamente al CBU del trabajador. Por lo tanto, el fraude requería la complicidad de personas reales que recibirían el dinero.
Según contaron desde el Ministerio de Producción, la alarma se encendió porque en el cierre del mes de abril llamó la atención una empresa que había sumado 31 nuevos empleados, algo atípico en medio de la crisis económica actual. Al indagar un poco más, descubrieron que era una compañía fantasma: no existía. Automáticamente, verificaron en el sistema qué un empleado de Enlazados había cargado los datos al sistema y allí "saltó" el nombre de la responsable.
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El siguiente paso fue chequear el "historial" de la joven en el servidor y, a partir de allí, pudieron reconstruir cómo se había aprovechado de una "ventana" del sistema durante los cuatro meses anteriores (diciembre, enero, febrero y marzo) para desviar cerca de $26 millones.
Desde el programa Enlazados contaron al Post que, cada mes, entre la fecha de control y la liquidación de los salarios, la mujer ingresaba al sistema e incluía 31 CBU en distintas empresas, de manera aleatoria. Un día después, luego de que se depositaba el dinero en cada cuenta, volvía a ingresar al sistema y borraba los datos. Esta irregularidad no fue detectada durante cuatro meses, y recién se activó la alarma cuando la joven fue más allá e intentó agrupar a los 31 cómplices en una sola empresa que, además, no existía.
Por ejemplo: si el control era el 28 y los pagos se hacían el 29, la mujer se metía al sistema el 28 a la noche, incluía los nombres de sus cómplices en empresas, de forma aleatoria, y los borraba el 29 después de que les habían depositado el dinero. Entonces, durante cuatro meses logró que 31 personas cobraran un salario mínimo vital y móvil sin trabajar.
Esto se descubrió "de casualidad", ya que si la joven no registraba una empresa falsa, ninguna alarma se habria encendido y quizas el fraude previo nunca salía a la luz.
Teniendo en cuenta el monto del SMVM hasta el mes pasado, la cantidad de meses y el número de personas que recibieron el dinero, el fraude ascendería a unos $26.000.000.
Ahora correrá por cuenta del fiscal de Delitos Económicos, Juan Ticheli, verificar la responsabilidad de cada uno de l0s 32 involucrados: Cáceres y las 31 personas a las que se les depositó el dinero.