Una Cámara laboral condenó a la federación a pagar esta suma a tres extrabajadores por "despido discriminatorio y daño moral". Los detalles del caso.
Fallo judicial: Fecovita deberá pagar $60 millones a tres exempleados
La Sexta Cámara del Trabajo de Mendoza ordenó a la Federación de Cooperativas Vitivinícolas Argentinas (Fecovita) a pagar una "indemnización por despido discriminatorio y daño moral" a tres exempleados y pagarles la suma total de $58.455.648 más los intereses legales hasta su efectivo pago, al aceptar parcialmente una demanda en la que, de todas maneras, rechazó la reinstalación que había solicitado los trabajadores.
Fecovita argumentó que despidió a los tres empleados alegando razones relacionadas con la reestructuración de personal debido a una disminución en las ventas. Sin embargo, los demandantes sostienen que los despidos fueron discriminatorios y una represalia por su participación en actividades gremiales durante un conflicto colectivo de intereses laborales en 2021. Además, argumentan que los acuerdos de desvinculación fueron forzados y fraudulentos, utilizados para encubrir los" despidos discriminatorios y silenciar" a trabajadores que reclamaban mejoras salariales y condiciones laborales.
Entre los días 10 y 20 de agosto de 2021, se firmaron acuerdos de extinción del vínculo laboral que el tribunal consideró ilegales, ya que violaban el Código Civil y la normativa laboral.
En otras palabras, el tribunal determinó la nulidad de los acuerdos de desvinculación y falló a favor de los demandantes, estableciendo que FECOVITA debía pagarles indemnizaciones por despido sin causa y por daño moral. Además, se reconoció que la participación de los empleados en actividades gremiales fue un factor determinante en sus despidos, evidenciando una represalia por sus reclamos laborales y su participación en el conflicto colectivo.
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En consecuencia, la Justicia ordenó a la cooperativa pagar las indemnizaciones correspondientes a los tres exempleados, reconociendo así la "vulneración de los derechos de los trabajadores" y la necesidad de protegerlos ante situaciones de abuso de poder.
La federación, de esta forma, tendrá que desembolsar casi 60 millones de pesos (esto dividido en los tres empleados que recibirán distintas sumas, según establece el fallo) y realizar estos pagos en su totalidad y de manera oportuna en el plazo de cinco días hábiles.
Nicolás Guillén, abogado de los demandantes, comentó al Post que "es muy importante la difusión de este fallo para promover las buenas prácticas laborales cumpliendo con los convenios firmados por el Estado".
El conflicto que desencadenó los despidos
En el año 2021 se desarrolló el conflicto colectivo de intereses laborales más grande que se recuerde en la historia de la industria vitivinícola de la provincia y del país: 18.000 obreros registrados mostraron su necesidad de recomposición salarial a las cámaras empresarias siendo protagonistas de una movilización sin precedentes que tuvo el punto más álgido en un paro nacional de actividades los días 30 y 31 de marzo de 2021, con un altísimo acatamiento, con manifestaciones o piquetes en los portones de las principales bodegas, con movilizaciones masivas por el centro de Mendoza.
Las autoridades formales del Sindicato SOEVA Maipú "no estuvieron a la altura de sus responsabilidades y obligaciones legales para organizar y canalizar institucionalmente los imperiosos y urgentes reclamos de los trabajadores", sostuvo Guillén.
"El sindicato, al no estar a la altura de la situación, generó una situación de vacío, que fue llenada con la actividad gremial espontánea de un grupo de trabajadores que tuvieron un grado de exposición mayor al resto, y esos justamente fueron los elegidos por la empresa para ser despedidos bajo el disfraz de pseudo convenios de ruptura consensuada, y así dar un mensaje de disciplinamiento laboral al resto de los trabajadores", agregó el abogado.
En definitiva, sostiene la parte actora que cuando los trabajadores accionantes, frente a la pasividad del Sindicato, optaron por desarrollar actividades gremiales, tener opinión gremial y representar a sus compañeros que se encontraban sin la representación adecuada, fueron despedidos, configurándose una notoria y evidente discriminación, práctica desleal y abuso patronal.
El fallo completo
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