Tras la medida del gobierno y la transformación de la empresa en una S.A. Pablo Gordillo Arriagada aseguró que "buscamos transformar YCRT en una empresa productiva y eficiente".
El interventor de YCRT aseguró que "no es una privatización"
En horas de la mañana de este miércoles, el interventor de Yacimientos Carboníferos Río Turbio (YCRT), Pablo Gordillo Arriagada dialogó con "Tenés que saberlo" programa conducido por Gabriel Conte y equipo por Radio Post (FM 92.1 en el Gran Mendoza, 96.9 en Luján de Cuyo, 100.1 en San Martín y 96.7 en La Paz). El interventor detalló la actualidad de la empresa y los cambios estructurales que lleva adelante el gobierno nacional.
Cabe recordar que Gordillo asumió en octubre de 2024, de la mano del gobernador de Santa Cruz, Claudio Vidal, con la misión de dar un nuevo rumbo a la compañía, que arrastra más de dos décadas de intervención sin una figura jurídica clara.
"En estos 23 años, la empresa operó más como un organismo público que como una unidad productiva. Por eso, se tomó la decisión de darle una nueva figura jurídica acorde a las necesidades actuales", explicó el funcionario.
Uno de los cambios más relevantes es la transformación de YCRT en una Sociedad Anónima, donde el Estado retendrá el 51% del control accionario, siguiendo un esquema similar al de YPF.
"Esto no es privatización, sino la apertura a inversión privada hasta un 49%, lo que permitirá reactivar la usina de 240 MW, paralizada desde hace 15 años", aclaró Gordillo, rechazando las acusaciones de sectores gremiales sobre un supuesto vaciamiento.
El interventor destacó la magnitud operativa de YCRT, que abarca una mina de carbón, un ferrocarril de transporte, un puerto en Punta Loyola y la mencionada usina termoeléctrica.
Ver también: La Cámara autorizó la licencia de Lijo, pero aún no podría asumir en la Corte
"El carbón de Río Turbio es de baja concentración de azufre, lo que lo hace atractivo para mercados internacionales. En los últimos meses logramos vender 30.000 toneladas a tres países, algo inédito desde 2019", subrayó.
Sobre el impacto económico, Gordillo brindó cifras contundentes: "El gasto corriente en salarios es de aproximadamente 7.000 millones de pesos mensuales, sin contar gastos operativos. En 2023, se gastaron más de 50.000 millones sin generar ingresos significativos". En este sentido, aseguró que el ingreso de capital privado es clave para reducir el déficit y convertir a YCRT en una empresa sostenible.
Consultado sobre la relación con los gremios, el interventor señaló que hay cuatro sindicatos en la compañía (ATE, APS, Luz y Fuerza y La Fraternidad) y que se ha abierto una mesa de negociación para definir un nuevo convenio colectivo de trabajo en un plazo de 160 días.
"La transformación de la empresa es necesaria para su supervivencia. No se trata de despidos ni de vaciamiento, sino de ordenar una estructura que estuvo en el limbo durante 23 años", afirmó.
Finalmente, Gordillo resaltó el potencial de YCRT para contribuir al sistema energético nacional: "La usina de 240 MW fue diseñada para aportar energía al interconectado nacional. Estamos avanzando en acuerdos con CAMESA y la provincia de Santa Cruz para vender la energía generada, lo que garantizaría ingresos genuinos".
Con una nueva estructura jurídica y la apertura a inversiones privadas, YCRT busca dejar atrás años de ineficiencia y convertirse en un actor clave del sector energético. "Nuestra meta es clara: transformar YCRT en una empresa productiva, eficiente y autosustentable", concluyó Gordillo.
Ver también: Milei mencionó a un mendocino ilustre para justificar el "decretazo" en la Corte
Escucha la nota completa