La dirigente de la Coalición Cívica confirmó que Macri quiere ser candidato a presidente pero aclaró que ella no lo votaría en esa aventura.
Elisa Carrió contundente contra Macri: "No lo votaría"
La líder de la Coalición Cívica- ARI, Elisa Carrió, se metió en terreno electoral de cara al 2023 y aseguró que "está claro" que su par del PRO, Mauricio Macri, pretende ser candidato presidencial, aunque aclaró que "no lo votaría".
En diálogo con LN+, la ex diputada nacional contó que "Macri tiene muchas coincidencias con (Javier) Milei", haciendo mención a un tema que parte aguas en Juntos por el Cambio como es la posible inclusión del referente libertario en la alianza opositora.
De todas maneras, "Lilita" aseguró que no apoyaría en las urnas al ex presidente: "No sé por quién voy a votar y no sé lo que va a pasar el año que viene. Yo no votaría a Macri, aunque está en todo su derecho de presentarse".
Asimismo, recordó que durante la gestión del ex mandatario lo acompañó a pesar de sus críticas a algunos funcionarios del Gabinete como el entonces ministro del Interior, Rogelio Frigerio, a quien acusó de "entregar" al espacio en las elecciones de 2019.
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"Fui la única que lo apoyé. Lo acompañé en el búnker y al otro día salí sola a pelearme con todos los del PRO para decir `todavía tenemos más´. Estuve hasta el último día de la derrota", recordó Carrió.
Y completó: "Entonces, Mauricio jamás puede decir que yo no fui la persona que más lo acompañó. No en los buenos momentos, sino en los peores. Pero voy a seguir peleándome con él, como siempre a los gritos. Él lo va a entender, porque los ingenieros son cerrados, pero de lógica entienden".
Por otra parte, la chaqueña también analizó la crisis en el Frente de Todos y definió: "Hoy a la Nación no la conduce (Alberto) Fernández, tampoco la conduce Cristina (Kirchner). No la conduce nadie".
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Por eso, la referente opositora pidió que los "liderazgos responsables" puedan "acompañar y conducir a la Nación hacia una elección libre y disputada, donde se elijan las próximas autoridades".
"El Presidente es el que tenemos, no hay más; y la vicepresidenta es golpista", acusó, y argumentó: "En un sistema presidencial, el vicepresidente acompaña o se calla. Y preside el Senado. Lo que no puede hacer es impugnar permanentemente la institución presidencial".
Por último, fundamentó: "Tenemos un pésimo Presidente, pero la República exige que sostengamos a la autoridad presidencial".
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