Dirigentes y militantes, algunos sindicatos y asambleístas por el agua se movilizaron por las calles del centro este miércoles. En medio de un fuerte operativo policial, ocuparon solo media calzada.
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Las calles céntricas de Mendoza replicaron la manifestación que tuvo lugar en Buenos Aires en el marco de un nuevo aniversario del 20 de diciembre de 2001. En ese contexto, algunos de los dirigentes de izquierda que encabezaban la manifestación brindaron sus testimonios al Post.
Lautaro Jiménez, dirigente del PTS, aseguró que la marcha se dio en un contexto "donde miles de familias que no puedan tener un verano en paz". Mientras que agregó que "realmente el pueblo está nuevamente en las calles y la resistencia empezó. Este es el primer paso de una lucha histórica que el pueblo trabajador ha dado y va a seguir dando por sus derechos".
En un sentido similar se expresó el dirigente del Partido Obrero, Víctor Da Vila, quien dijo que "es un rechazo a la política de ajuste que está impulsando el presidente Javier Milei y Luis Caputo, su ministro de economía. Han empeorado lo que ha hecho el gobierno anterior, se ve el aumento escandaloso de los alimentos, de la pobreza, de los combustibles y se preparan una serie de tarifazos en los servicios públicos, una serie de modificaciones a la legislación laboral que va a barrer con lo poco que quede de protección para los trabajadores".
Un fuerte operativo policial custodio la marcha.
En cuanto a la marcha con media calzada y una fuerte presencia policial, con un policía cada cuatro manifestantes aproximadamente, Jiménez subrayó que "lo que destaco es la solidaridad y el hecho de que no haya miedo, de que realmente estemos todos juntos acá en la calle nuevamente, demostrándoles que no les tenemos miedo".
"Todo este despliegue policial no es nada más que un circo y la gente lo sabe bien, es un circo, es algo que intenta mostrar algo para que la gente se quede en su casa. Pero la gente sabe que solamente saliendo de casa, uniéndose y ganando las calles podemos defender el agua, podemos defender la educación, podemos defender el derecho de los trabajadores", sentenció el dirigente trotskista.
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Por su parte, el dirigente del Polo Obrero, Martín Rodríguez, "entendemos que ha sido un triunfo importante de los movimientos de lucha, no solo de la unidad piquetera, sino también de los sindicatos, organismos de DDHH que se sumaron y que lograron sortear el operativo que había establecido Bullrich".
Finalmente, Rodríguez lanzó críticas al gobierno nacional y aseguró que "la política de Javier Milei y el protocolo de Bullrich no sólo son inconstitucionales, sino que también entendemos que lo que busca es desalojar a los trabajadores de la calle porque las medidas que van a anunciar van a ser terribles".
Las organizaciones concentraron en Peatonal y San Martín.
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