Los dueños actuales notifican este lunes a un grupo de periodistas y fotorreporteros en la sede del diario. También cerraron la planta impresora.
Despidos masivos en diario Los Andes, previo a la venta
Este lunes, en la sede de diario Los Andes, personal de recursos humanos y una escribana, y con la presencia de policías, notificaron despidos masivos de periodistas y fotorreporteros. Todo esto ocurre en la previa de la venta del diario, ya que sería condición de los nuevos dueños achicar lo más posible la estructura laboral.
En el ingreso al diario, personal de seguridad y una escribana tienen una lista de empleados de Los Andes que, a medida que van llegando, les notifican que han sido despedidos. A otros les avisaron previamente que no vayan y que en los próximos días les llegaría el telegrama de despido.
"Los acompañan a buscar las cosas y se van", explicó uno de los afectados al Post, que se enteró de que había sido despedido esta mañana, al llegar a la sede de Los Andes, en avenida San Martín. Allí también arribó el gremio de Prensa. "Algunos se enteraron por WhatsApp", agregó.
Policías adentro del diario.
Al mismo tiempo, Los Andes decidió cerrar la planta impresora y despedir al personal de ese predio. Sobre esto, la empresa emitió un comunicado: "Desde mañana, los ejemplares comenzarán a imprimirse en una planta externa". Y justificó la medida en que se trata de una "tendencia de la prensa global de establecer sinergias de impresión".
Desde el año pasado hay acuerdo entre los actuales dueños de Los Andes (Grupo Clarín y socios minoritarios de Mendoza) con un grupo de empresarios que pasarían a controlar el diario en junio. Entre estos están los dueños de Andesmar (Badaloni), parte de la familia Barbera (Grupo Broda) y la familia Alonso, de Canal 9 y otros medios, y no se descarta que se sume algún otro empresario.
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El acuerdo entre los actuales dueños y los que vendrán incluiría el mayor "achicamiento" posible de la planta de personal y la estructura. En otras palabras, con los despidos masivos y el cierre de la planta impresora estarían allanando el camino a los nuevos propietarios.
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