En conversación con Tormenta de Ideas, Carlos Dávalos se refirió a lo que será el balotaje que enfrenta a los dos extremos de la política peruana y que genera expectativa en todo el continente.
Desde Mendoza, anticipan un fuerte voto "anti K" en las elecciones peruanas
Carlos Dávalos, jefe de campaña de Pedro Castillo en la Argentina, considera que el próximo fin de semana en el balotaje que enfrentará al candidato de izquierda con Keiko Fujimori, habrá mucho voto "anti K" que se reflejará en una victoria del candidato sorpresa del proceso electoral en Perú.
En conversación con Tormenta de Ideas, programa conducido por Gabriel Conte y Santiago Montiveros y que se transmite de 8.30 a 9.30 por Radio Nihuil, comentó el panorama electoral y aseguró que para él fue una decisión difícil elegir a Castillo como su candidato, lo que seguramente se repetirá en cada votante peruano.
"Pienso que es momento de un cambio y por eso decido apoyar al profesor Castillo en el proyecto de Perú Libre y me costó tomar la decisión por todo lo que representa, que es una izquierda extrema contra una ultraderecha dictatorial", explicó.
En ese sentido, indicó que "decidir no es cosa fácil en un escenario como este y, sin embargo, hay que tomar una decisión. Analizando el profesor representa la voz de hartazgo de un sector que es la mayoría y en el medio de eso tenemos una deuda muy grande que es la desigualdad y la lucha contra la corrupción".
Al referirse a las cualidades de su candidato, dijo que "formará un equipo de profesionales para su equipo desde distintas fuerzas políticas, lo que va a ayudar a tener una visión más clara de lo que hay que hacer". En cambio, aseguró, "desde la vereda de enfrente hay una desesperación por llegar al poder y seguir con un modelo que ha fracasado porque benefició a unos pocos. Pienso que el gran objetivo de ellos es blindarse ante los procesos que tienen".
Dávalos fue categórico y manifestó que por todo lo que indicó "hay mucho voto anti K y es el momento justo del cambio".
Perú enfrentará un balotaje en el que deben elegir entre lo que es considerado la izquierda extrema peruana y la ultraderecha personificada por la hija del expresidente Alberto Fujimori, amado y odiado en su país.