Las olas de calor y del virus hicieron un combo infernal. La suba de las tarifas completó el escenario. Mientras, en el sur quieren defender a Portezuelo del Viento, pero buscan su propio "plan B" si no se hace.
El "nexo epidemiológico" contra Ómicron y la reparación a Malargüe
Un enero avasallante se siente en Mendoza por la incandescencia del sol que elevó a la temperatura a más de 40 grados y eso evidencio las precariedades de los sistemas de los servicios públicos como la electricidad, y el agua potable. Para colmo fue la semana de los aumentos de las tarifas de eso mismos servicios en situación crítica (sumado el pasaje de colectivos).
Así que, como pasa en todo país socioeconómicamente "atado con alambres", esta semana fue paradójica ("parajódica" diría con fina ironía, Jorge Sosa). Por ejemplo, el mismo día de los incrementos del precio del agua, pobladores de Ugarteche cortaron la ruta 40 en reclamo del líquido vital. Hacían tres días que sus grifos estaban secos en medio de la ola calor. A este escenario hay que sumarle el sistema eléctrico también se resintió con cortes por el aumento de la demanda de energía para refrigerar los ambientes.
Todo pareció conspirar para que también subiera el fastidio social porque si de aumentos se trata, la Covid 19 también siguió subiendo sin freno. La cantidad de contagios no paró y continuará, de acuerdo a los cálculos epidemiológicos estamos a mitad de camino de esta otra ola de coronavirus que empuja variante Ómicron.
Mendoza reportó 4.206 nuevos casos con 56% de positividad
Otra pandemia
"Si no tenés un amigo con Covid, entonces no tenés amigos". El humor "viralizado" sobre la pandemia es útil para resumir la actualidad que nos atraviesa con 4 mil casos positivos por día. Veamos en esta mesa de trabajo de cada semana el asunto sanitario de Mendoza que hace que miles de personas salgan a la calle a buscar un centro de testeo para confirmar si están contagiadas por el virus pandémico.
La ministra de Salud Ana Nadal junto con su equipo observan la dificultad que tiene la población para entender los cambios de las estrategias que se deben aplicar según el comportamiento de la veloz variante sudafricana. Dicho sea de paso Ómicron contagia seis veces más que su competidora Delta que aún subsiste pero va retrocediendo.
La novedad es que habrá que adoptar una práctica de detección del virus que no requiere del testeo o sea del emblemático hisopado, sino que se trata de un diagnóstico clínico basado en la encuesta a la persona presuntamente infectada tomando en cuenta los síntomas y el cuadro de relación familiar o laboral con casos positivos confirmados. Es el llamado "nexo epidemiológico" que deberá ser considerado tan válido como un PCR o un test rápido por antígeno.
Este cambio en la detección denota que estamos en "otra pandemia", como ha dicho Nadal. Dicho más claro, estamos en transición a la endemia, así lo entienden los especialistas. Es como el preludio a la radicación del virus entre nuestra población como lo es la influenza (la gripe) lo que la hace mucho más manejable con el tratamiento con las vacunas.
La síntesis es que vamos hacia la endemia de la enfermedad mientras las vacunas confirman su efectividad contra el virus, por lo cual terminaremos vacunándonos periódicamente para fortalecer nuestro sistema de defensas ante un virus que irá mutando pero en versiones menos agresivas.
En lo práctico, el diagnóstico por nexo epidemiológico deberá ser valorado por la persona afectada y validado con una certificación oficial del estado de enfermedad para justificar la ausencia en los espacios laborales.
Semana 8
La proyección más firme sobre cuándo cederá esta tercera ola contagios y de acuerdo a las experiencias en otros puntos del planeta tendremos que esperar hasta mediados de febrero para que notemos el descenso de casos.
Son ocho semanas de proceso contagioso masivo que impresiona, al punto que se debe asumir que la población mendocina terminará afectada por el virus de un modo u otro, es decir sintomático o asintomático.
Reflexionan los expertos que Ómicron es producto de la falta de provisión de vacunas que padeció Sudáfrica. Eso generó esta cepa que ahora predomina en todos los centros poblaciones del planeta.
La pelea por Portezuelo
Mientras el ambiente político parece estar en un periodo de "cultivo" y que dentro de un tiempo este desarrollo se evidenciará. Por ahora ocurre en el subterráneo.
Lo que hay que tener en cuenta es que la "rebelión" llegará desde Malargüe, la "patagonia" mendocina. Desde la época del fracaso del proyecto brasilero de Vale para explotar la mina de sal de potasio el departamento sureño siente discriminación y sufre el mendocentrismo por estar tan alejado del gran manchón poblacional y productivo del norte de la provincia de donde su realidad se ve distorsionada.
Hay un nuevo episodio de esta saga que incluso llevó al intendente radical Juan Manuel Ojeda a no presentar reina de la Vendimia en 2020 en protesta a la revalidación de la antiminera ley 7722 que tiró abajo cualquiera aspiración de desarrollar la actividad a gran escala en ese territorio.
Luego del pedido de un pronto despacho por parte del gobernador Rodolfo Suarez para que el presidente Alberto Fernández laude para que se realice o no, la obra hidroeléctrica Portezuelo del Viento (PdV) ahora esperan el viernes 21 como límite fijado por el mismo reclamo administrativo del mandatario provincial.
Algunos juristas no lo dicen abiertamente pero entienden que Fernández no tiene ninguna obligación de dar respuesta a ese pedido de laudo por lo cual dentro de las posibilidades existe que no responda y no laude.
Con las ganancias que generaría Portezuelo se podrían construir 30 escuelas por año
En ese sentido entonces, esa fecha parece ser el límite que el mismo Suarez se ha puesto para definir qué hacer con la mega obra por la cual viene recibiendo en cuotas los mil millones de dólares comprometidos como compensación a los perjuicios que soportó Mendoza por el régimen de promoción industrial en la década del '90.
Hay alternativas a Portezuelo, Alfredo Cornejo, siendo gobernador lo previno y de algún modo visualizó este presente donde el desvanecimiento de la cruzada por PdV se nota. El último intento en defensa del proyecto es impulsado por la Cámara de Comercio de Malargüe que el jueves 13 se reunieron con el ministro de Gobierno Víctor Ibañez quien los recibió en su despacho oficial. El ministro político de Suarez se quedó con el petitorio de empresarios y concejales malargüinos para que el Ejecutivo provincial encabece una misión para sostener la obra hidroeléctrica pensada sobre el río Grande.
Reparación histórica
La molestia sureña está enfocada en el presidente que dilata su definición sobre el asunto y le pone la oreja a su compañero peronista Sergio Ziliotto, gobernador de La Pampa que tiene montada una campaña contra PdV y que es parte de la histórica pelea por el aprovechamiento de los ríos de montaña que nacen en la cordillera y desaguan en las llanuras de la provincia patagónica.
Pero también subyace un enojo con el gobernador por su decisión de anunciar el 28 de diciembre que tiene un "plan B" si Portezuelo finalmente no se concreta. En Malargüe vieron ese anuncio como un contrapaso al proyecto y el inicio de un desinterés a defender la obra a nivel provincial. "¿Cómo le pedimos el apoyo a los demás intendentes para que acompañen el reclamo por Portezuelo si ya tienen la expectativa de recibir dinero para sus departamentos y que estaban destinados para la obra?", se preguntan ante este escenario.
Por eso entre representantes privados y políticos surgió del fenómeno mendoexit, pero en versión malargüina empujado por Gabriel Ferrero referente del MoPoMa el partido municipal símil a los movimientos provinciales patagónicos de Neuquén y Tierra del Fuego.
Y es por eso que tras el telón se está cocinando en el lejano sur un proyecto de "fondo de reparación histórica" para Malargüe planeado desde el ala oficialista del Pro cuya principal referente es Verónica Bursten aspirante a la intendencia en el proceso electoral de 2019.