Luego de que el oficialismo consiguiera el respaldo al veto de la Ley de Financiamiento Educativo, la exvicepresidente repartió fuertes críticas dentro del PJ.
Cristina Fernández trató de "tránsfugas" a gobernadores y legisladores del PJ
A través de sus redes sociales, la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner arremetió contra gobernadores y legisladores peronistas que apoyaron el veto del presidente Javier Milei, a la Ley de Financiamiento Universitario. Sin nombrarlos directamente, CFK apuntó especialmente contra el gobernador tucumano Osvaldo Jaldo, el catamarqueño Raúl Jalil y el diputado misionero Alberto Arrúa, a quienes acusó de "transfuguismo político".
Bajo el título "El voto y el veto", la ex vicepresidenta criticó que "el voto contra la universidad nacional, pública y gratuita prevaleció, y el veto de Milei contra la educación sigue vigente".
Kirchner denunció la supuesta intervención de ciertos gobernadores peronistas que habrían presionado a legisladores de sus provincias para que apoyaran el veto de Milei. Aunque no mencionó nombres, las imágenes que acompañaron su publicación mostraban artículos periodísticos en los que se critica a Jaldo, Jalil y Arrúa por su rol en la votación.
Uno de los blancos principales de su crítica fue el legislador misionero que, según CFK, hizo el gesto de "carita sonriente y los deditos en V", una acción que la ex mandataria interpretó como una burla hacia el perjuicio causado a la universidad pública. Kirchner destacó que, si esos legisladores hubieran votado en contra del veto, el financiamiento universitario habría sido aprobado.
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Kirchner vinculó este episodio con lo que considera una crisis más amplia dentro del peronismo. "Las razones de este verdadero transfuguismo político las explica mejor que nadie el título y contenido de la nota publicada hoy por Infobae: ‘El gobierno aprovechó las necesidades provinciales y profundizó las fisuras en casi todos los bloques opositores'", citó en su escrito.
La ex presidenta también lanzó un llamado a la reflexión dentro del peronismo, sugiriendo que este tipo de traiciones son parte de la razón por la cual figuras como Milei han ganado terreno en el escenario político. "Esto es lo que está destruyendo las representaciones políticas y sus instituciones", señaló, subrayando que el movimiento debe "enderezar lo que se torció".
En consonancia con su crítica, Cristina Kirchner aprovechó la ocasión para reiterar su interés en liderar el Partido Justicialista (PJ) a nivel nacional. En una carta pública, agradeció el apoyo recibido para asumir la presidencia del partido y reafirmó su disposición a enfrentar este nuevo desafío. "Nunca he ocupado un lugar sin tener la certeza de estar capacitada para la tarea encomendada; sin miedo ni presiones", escribió.
A lo largo de su mensaje, la ex presidenta expuso su visión sobre la necesidad de un "segundo trasvasamiento generacional", buscando incorporar a nuevas generaciones de militantes desde las escuelas secundarias, universidades, sindicatos y movimientos sociales.
La carta de CFK:
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