Diez años sin Nisman: qué dice el peritaje que sostiene que fue asesinado

En el décimo aniversario de la muerte del fiscal, un repaso por los puntos clave del informe pericial presentado por la querella que impulsa la teoría del homicidio. Además, los hitos principales del caso y qué paso con la denuncia del fiscal contra Cristina Kirchner.

Diez años sin Nisman: qué dice el peritaje que sostiene que fue asesinado

Editó: Mariano Rivas

Este sábado 18 se cumplieron diez años de la muerte del fiscal Alberto Nisman, quien fue encontrado con un disparo en la cabeza en su departamento de Puerto Madero, un día antes de presentar una denuncia contra la entonces presidenta Cristina Fernández de Kirchner. El caso, que marcó un antes y un después en la historia política argentina, sigue envuelto en controversias y debates sobre si se trató de un suicidio o un homicidio.

Si bien un reciente informe de la Justicia federal sostiene que a Nisman lo mataron por haber investigado el presunto encubrimiento del atentado a la AMIA, el escrito que compartió el fiscal Eduardo Taiano no aporta precisiones sobre los autores materiales e intelectuales del hecho.

Uno de los pilares de la postura que sostiene que Nisman fue asesinado es el peritaje presentado por la querella encabezada por su exesposa, la jueza Sandra Arroyo Salgado. Este informe, elaborado en los meses posteriores a la muerte del fiscal por un equipo de peritos de confianza de la familia, contradijo el dictamen inicial de la fiscalía de Viviana Fein, que era quien llevó la causa hasta que fue apartada.  

En principio, el único imputado era el asesor informático Diego Lagomarsino, por haberle proporcionado a Nisman el arma de la que salió el disparo letal, siendo que el fiscal no tenía permiso para portar armas. La Junta Médica había concluido que no existían indicios que abonaran la teoría del asesinato. 

La jueza Sandra Arroyo Salgado, ex esposa de Nisman.

Sin embargo, el informe pericial que aportó la querella iba en otra dirección. Hablaba de signos de violencia, afirmaba que el baño donde hallaron a Nisman había sido intervenido para eliminar pruebas, y apuntaba también a la trayectoria de la bala, la cual, señalaba, no coincidía con un disparo autoinflingido: una segunda persona debía haber apretado el gatillo.

Los principales puntos del peritaje que habla de homicidio

-Nisman habría forcejeado con alguien: el cuerpo del fiscal tenía señales de agresiones, como lesiones en las piernas y un golpe en la cabeza. Según los peritos de la querella, estas lesiones eran compatibles con un forcejeo previo al fallecimiento. En particular, el golpe en la cabeza indicaba un intento de reducirlo físicamente antes del disparo.

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-Un disparo llamativo: el peritaje concluyó que la trayectoria del disparo, junto con la posición en la que fue hallado el cuerpo, no era compatible con un suicidio. La ubicación de la pistola, el ángulo del disparo y la postura corporal indicaban la intervención de otra persona.

Marcha por Nisman en la puerta del edificio Le Parc, donde murió.

-Huellas de más personas: los peritos identificaron huellas y rastros que sugerían la presencia de más de una persona en la escena del crimen. Otro punto muy discutido fue que el informe decía que no había rastros compatibles con un disparo a corta distancia autoinfligido, como pólvora en las manos de Nisman.

-¿Manipularon la escena?: el informe indicaba que la escena del crimen había sido manipulada. Por ejemplo, hablaba de "desorden selectivo" en ciertas áreas del departamento donde murió Nisman. El informe fue respaldado en su momento por la Gendarmería Nacional, que en 2017 también concluyó que Nisman fue asesinado.

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-Una autopsia cuestionada: según el peritaje, la autopsia oficial presentó omisiones importantes, como la falta de estudios complementarios para determinar con precisión la hora de la muerte. Arroyo Salgado y su equipo insistieron en que estas omisiones fueron deliberadas y destinadas a ocultar indicios de un homicidio.

Diez años sin respuestas

En la década transcurrida, el caso se convirtió en un terreno de disputa política y judicial. La causa por la muerte de Nisman todavía no se elevó a juicio. En los meses posteriores al hecho, pasó del fuero ordinario al fuero federal, quedando a cargo del juez Julián Ercolini, con Taiano en la instrucción.

Diego Lagomarsino sigue procesado como partícipe necesario del hecho, por haber entregado la pistola Bersa que causó la muerte del fiscal.  Otros procesados por Ercolini son cuatro custodios del ex fiscal, por "encubrimiento agravado" e "incumplimiento de los deberes de funcionario público".

Diego Lagomarsino sigue procesado como "partícipe necesario".

En 2018, la Corte Suprema ratificó la jurisdicción federal de la causa, reconociendo que el caso involucra intereses estatales y podría vincularse a un crimen de carácter político. 

El viernes 10 de enero de 2025, el fiscal Taiano presentó un informe sobre la pesquisa que ratifica que Nisman fue víctima de un homicidio y que su muerte estuvo motivada en su labor en la investigación del atentado a la AMIA y su encubrimiento. Sin embargo, sobre la identidad de los asesinos, solo afirma: "Se encuentran en curso la producción de medidas tendientes a determinar la identidad de aquellos que ejecutaron el hecho y de quiénes lo ordenaron, conforme a la hipótesis de la fiscalía". Es decir, la autoría intelectual y material es todavía una incógnita.

En qué quedó la denuncia de Nisman contra CFK

La denuncia que Nisman planeaba presentar también atravesó su propio camino. En ella, el fiscal acusaba a Cristina Kirchner y a funcionarios de su gobierno de encubrir a los responsables del atentado a la AMIA mediante el memorándum de entendimiento con Irán. Si bien inicialmente fue desestimada, la causa fue reabierta en 2016 por impulso de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA) y del juez Claudio Bonadio.

  La denuncia de Nisman, tras ser desestimada, fue reabierta y obligará a Cristina Kirchner a ir a juicio oral.  

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En 2021, la Justicia sobreseyó a los acusados, incluyendo a la ex presidenta, al considerar que el memorándum con Irán fue un acto de política de Estado y no constituía un delito. Dos años después, tras una apelación, la Cámara de Casación revocó el sobreseimiento, y la Corte Suprema de Justicia confirmó la decisión en diciembre de 2024, por lo que CFK deberá ir a juicio oral por el memorándum con Irán, la denuncia que había impulsado el fiscal Nisman.

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