La empleada municipal que denunció el abuso sexual por el que hay un ex funcionario imputado, dice que encubrieron su caso y la intimidaron para que nunca denuncie. El testimonio de un ex funcionario revela que Orozco y Ortiz sabían lo que había ocurrido.
Denuncian por encubrimiento de abuso sexual a Orozco y Ortiz
El abuso sexual con acceso carnal denunciado por una empleada municipal de Las Heras dos meses atrás fue el caso con el que inició #LasHerasGate, una saga horrorosa que incluye aprietes, amenazas, uso de armas, coacción, encubrimiento, grabaciones de audios y videos a personas sin su consentimiento, persecución, probable corrupción, y varias causas judiciales que ya tienen imputados, como el caso de la cooperativas que publicó este diario en una profusa investigación publicada el 14 de junio, después de las PASO que definieron candidatos a gobernador e intendentes de la mayoría de los departamentos de la provincia. La última novedad es una denuncia que apunta directamente al intendente Daniel Orozco y a su pareja y Secretaria de Gobierno Janina Ortiz. La misma empleada que denunció el abuso y que pasa por estos días por todo tipo de peritajes, denunció a ambos funcionarios por encubrimiento, coacciones, abuso de autoridad e incumplimiento de los deberes de funcionario público. Lo hizo con un escrito de 48 páginas presentado por sus abogados Ramiro Villalba y Josefina Ferro el domingo último. La denuncia ya se convirtió en expediente judicial el lunes y recayó en la Fiscalía de Delitos No Especializados de Gabriel Blanco, el mismo fiscal que ya imputó por coacción agravada por uso de arma a la Directora de Relaciones con la Comunidad Patricia Rivero, y a su hija Carolina Murúa, supervisora de la misma repartición.
Esta nueva denuncia complica aún más el panorama político y judicial de Las Heras. Por la gravedad de los testimonios que contiene, además, probablemente extenderá una mancha de aceite muy difícil de esquivar por Daniel Orozco y Janina Ortiz. De acuerdo a los testimonios, ambos sabían muy bien que había existido un abuso sexual y que se lo estaba encubriendo. También, que dos empleadas estaban denunciando "aprietes" de todo tipo. Orozco y Ortiz fueron informados de todo cuando ocurría por el ex director de Asuntos Legales de la comuna, Mauro Homan. Lo afirmó cuando declaró como testigo en una de las causas. Luego, está lo político. El intendente es candidato a vicegobernador de Omar De Marchi en La Unión Mendocina. Y Janina Ortiz secunda a Jorge Difonso en la lista de diputados provinciales al primer distrito, por la misma agrupación. Desde que el municipio de Las Heras se partió al medio por el éxodo de Orozco al frente populista opositor, el municipio se ha transformado en un verdadero caos institucional, administrativo, y de gestión. Básicamente, los que contenían la gestión y operaban la municipalidad antes de la aventura electoral de Orozco y Omar De Marchi, eran quienes hacían funcionar la gestión. Hoy es un abandono total.
La nueva denuncia
El abuso sexual contra la empleada municipal S.M hoy de 27 años, ocurrió en la víspera del 9 de julio de 2020, en plena pandemia, en el Centro Integrador Comunitario El Plumerillo. Mientras hacían sopaipillas para que el intendente Orozco repartiese el 9 de julio de aquel año, Día de la Independencia, el por entonces coordinador de juventudes Franco Cortez la agredió sexualmente en un baño. Por eso, ahora el ex funcionario está imputado por abuso sexual con acceso carnal. Lo que siguió fue un horror, y un testimonio muy crudo del maltrato a una mujer y a una de sus amigas, empleada municipal también. Una fue violada, manipulada, intimidada, coaccionada para callar, durante tres años. La otra, habría sido obligada a acostarse con el subsecretario de políticas sociales Osvaldo Oyhenart, y a grabarlo. De ese audio nació el "caso de las cooperativas".
Hemos relatado ya que el abuso sexual a S.M. fue el inicio de #LasHerasGate, en esta crónica. Ahora, lo que hay es una nueva denuncia por encubrimiento presentada por la misma víctima, y les apuntó a Daniel Orozco y a Janina Ortiz, los denunciados. Además, la chica se constituyó en querellante particular de este nuevo caso.
La prueba presentada en esta nueva denuncia es una prolija recolección de testimonios incriminatorios que ya se produjeron y que están en los expedientes de coacción contra ambas empleadas, y en el caso por el abuso sexual en el que está imputado Franco Cortez, integrante de una familia de "protegidos" y allegados de Janina Ortiz. Además de documentación interna del municipio, y el intento de sumario promovido por la propia Ortiz para echar a la empleada abusada hace apenas semanas. Sobre esa medida, debieron dar marcha atrás. Los testimonios aportados, de la propia víctima y de otros testigos, apuntan a revelar que tanto Orozco como Ortiz conocían el abuso sexual, y que no obstante no tomaron ninguna medida protectiva de la víctima, y por el contrario, encubrieron el caso en una larga cadena que posiblemente los exceda. En su escrito, la víctima pide que se investigue a toda la línea de funcionarios.
En la denuncia y ratificando lo que ya contó en los tres expedientes en los que ha estado declarando S.M, hay una serie increíble de aprietes, intimidaciones, coacción y amenazas. El comportamiento que asumieron los funcionarios con este caso, según los abogados de la víctima, se encuadra en los delitos de encubrimiento, abuso de autoridad, coacciones, e incumplimiento de los deberes de funcionario público. En la denuncia, además, hay parte del análisis que hizo el Cuerpo Médico Forense sobre la víctima, su relato, y sus emociones. La chica es creíble.
Hasta aquí, varios de estos aspectos de la nueva denuncia eran conocidos, por el devenir de los otros casos. Sin embargo, hay un testimonio en particular que sorprende, y que involucra a Orozco y Ortiz en los delitos por los que ahora los están denunciando: se trata de la declaración de Mauro Homan, ex director de Legales de Las Heras, a quien Orozco le había pedido que interviniera porque había dos empleadas "que querían hablar con él", que "tenían denuncias" y que "pedían dinero". Lo que sigue, son los párrafos más destacados de la declaración del ex funcionario incorporadas a este nuevo expediente, y que indican un claro encubrimiento del abuso sexual.
El testimonio clave
Los errores de sintaxis pertenecen al testimonio original. Dijo Mauro Homan: "...El intendente Daniel Orozco me pide que vaya a su oficina y (...) que atienda a dos mujeres que estaban en la sala de espera de la Municipalidad de Las Heras. Eran dos mujeres que no había visto nunca, y que para mí, era parte de mi trabajo habitual hasta ahí porque formaba parte de mi trabajo asesorar e informar gente. Yo las había visto al pasar por la sala de espera, visiblemente alteradas. El intendente me pide que pase al despacho, me hace pasar, cierra la puerta y me dice como él siempre se dirigía a mí y me dice: "Negrito, necesito que atiendas a estas dos mujeres, que están afuera que yo no las quiero atender." Le pedí que me informara más o menos la situación. Él me manifiesta que eran dos personas que andaban denunciando a algunos funcionarios de la municipalidad y que querían plata. No quería atenderlas. Me dijo que tuviera cuidado, que eran mujeres que grababan las conversaciones, uno de los motivos por los cuales él no quería atenderlas. Me habló de unos audios, que tendrían estas mujeres, (...) que comprometían a empleados municipales... Les informé que el intendente me había pedido que yo las atendiera, que él no iba a venir..." declaró. Luego, hizo el relato sobre ese encuentro con S.M y su amiga R.M, la empleada coaccionada para grabar a Oyhenart.
"Las dos personas estaban de pie, no habían querido sentarse. Exteriorizaban un enorme estrés, no se habían sentado, no eran agresivas pero estaban a la defensiva, y me manifestaron que ellas sólo iban a hablar con el Intendente porque querían que él supiera lo que estaba pasando. Les pedí que se calmaran, que tomaran asiento y que el intendente me había dado instrucciones de resolver el asunto..."
Como se advierte hasta aquí, el intendente conocía que habría probables delitos, que las mujeres habían sido víctimas de violencia, y de la grabación de R.M. a Osvaldo Oyenhart. Luego, Homan habló en su declaración sobre S.M. "Me dijo que a partir de que ella había denunciado en el municipio esta situación (...) vivía atemorizada y que la estaban hostigando laboralmente. Que la habían cambiado de lugar de trabajo y que ahora la querían cambiar a otro lugar donde no querían ir. Les pregunté si habían hecho la denuncia y me dijeron que no. Les pregunté por qué y me dijeron que porque tenían miedo, porque eran muy poderosos y no confiaban en la justicia. Le pregunté entonces qué es lo que querían si no querían denunciar. Y me dijeron que querían paz, tranquilidad, que no las echaran y que el intendente tomara conocimiento de la situación. No había mucho más para charlar. Les dije que yo iba a trasladar toda esta situación a mi superior y que yo me iba a contactar con ellas para ver cómo seguíamos. Después de ahí, (...) le llamé al intendente para informarle la situación, me dijo que estaba en la Secretaría de Gobierno, que está en otro edificio. Fui hasta ahí. Estaba dentro del privado de la Secretaría, junto con la Secretaria Janina Ortiz y a los dos les informé el relato de lo ocurrido". Es fácil apreciar que este testimonio incrimina directamente a Orozco y Janina Ortiz en un probable caso de encubrimiento de un abuso sexual a una empleada municipal.
Sobre el final del escrito firmado por la víctima y sus abogados y presentado como denuncia en el Ministerio Público, la argumentación de la víctima del abuso y posterior encubrimiento, resulta contundente.
"La administración municipal en vez solicitar protección judicial, urgente y preventiva en mi favor (y dar intervención al departamento de Género de la Municipalidad) me presionó para no denunciar, y tras haber denunciado en contra de su manda ilegal, me sumarió hasta que no pudo sostener más el sumario disciplinario". "Los funcionarios y funcionarias que sabían todos estos hechos tenían la obligación de denunciar. Por el contrario, encubrieron y en vez de ir en contra mis victimarios y victimarias, fueron en mi contra" denuncia.
Como en cada caso en que hemos tratado temas judiciales que involucran a funcionarios del municipio de Las Heras, hemos hecho la consulta oficial. La respuesta fue que "no van a hacer declaraciones ni brindar información" por este caso.
El entramado de #LasHerasGate se ha complejizado de tal manera, que hemos resumido en el siguiente cuadro las causas principales:
Hoy debía transcurrir la audiencia en la que el juez Sebastián Sarmiento iba a decidir sobre un recurso defensivo extraordinario presentado por la defensa de Janina Ortiz, que intenta evitar ser imputada en el caso de coacción denunciado por la empleada municipal que grabó a Oyhenart. Pero esta semana presentó un nuevo recurso, esta vez recusando al juez Sarmiento, indicando que no tiene competencia como juez de garantías porque en realidad es magistrado de ejecución penal. El argumento suena lisa y llanamente a tontería. Desde las reformas hechas años atrás, cualquier juez de primera instancia puede actuar como juez de garantías. Ahora todo pasó para la semana que viene. El lunes, el juez Sarmiento decidirá sobre ambas cuestiones. Lo más probable es que Ortiz apele nuevamente si las decisiones no le favorecen, o que su abogada María Elena Quintero plantee alguna otra cuestión, de modo de dilatar los casos. El objetivo parecería ser evitar a toda costa una imputación antes de las elecciones del 24 de septiembre, cuando Ortiz se juegue una banca en la Legislatura provincial.
La audiencia del lunes será tensa y con expectativa política. Aunque es probable que Janina Ortiz no esté presente. Tendría planificado un viaje al extranjero junto al intendente Orozco desde mañana hasta la semana próxima, aunque este trascendido no pudo ser confirmado oficialmente, hasta ahora. Si viajan, no estarán en la audiencia. Tampoco para votar en las elecciones PASO nacionales del domingo.
Más de este tema: Janina Ortiz pidió remover al juez Sarmiento para evitar ser imputada