De dónde salen los intentos de saqueo que preocupan en Mendoza

El 13 de diciembre de 2001, hace más de 20 años, un grupo de personas saqueó una sucursal de la cadena Átomo en la calle Avellaneda, de Guaymallén. Fue el primero del país, y el principio de los 25 saqueos que ocurrieron en Mendoza durante cinco días en aquel final anticipado del gobierno de Fernando De la Rúa. El sábado último, casi 22 años después, hubo en el mismo local un intento de saqueo, en paralelo a acciones similares ocurridas casi a la misma hora en otro Átomo, sobre la calle Independencia de Las Heras. En ninguno de los dos casos pudieron ingresar a estos supermercados. Existieron otros dos intentos el mismo sábado, en otro Átomo y en una sucursal de Supermercados Vea en Godoy Cruz. Tampoco pudieron ingresar. Pero los saqueadores frustrados se tomaron desquite a pocos metros. Una de las carnicerías del comerciante lasherino Javier Mignani sobre la calle Independencia fue destrozada. Es literal. El hombre había cerrado, alertado por los movimientos alrededor del Átomo a cien metros de su local. Igual, le desarmaron el negocio. Varios de los detenidos del sábado fueron de los que asaltaron esta carnicería destrozando persianas, siete exhibidores, balanzas, caja registradora, heladeras... y se llevaron cientos de kilos de mercadería. En la huida, muchos perdieron los trozos de carne en la vereda y en la calle. Las pérdidas de esta familia de comerciantes fueron millonarias.

El grupo que alentaba el saqueo del Átomo de la calle Avellaneda y Virgen de las Nieves, en Guaymallén, habría estado comandado por dos personas de Campo Pappa. Estarían identificadas y detenidas. Se movían en una VW Suran. Como no pudieron entrar al supermercado se metieron en un negocio cercano, a una cuadra. El dueño se defendió a trompada limpia y debió ser atendido con heridas. Igual, lograron robarle una caja de Fernet Branca del bueno. Por estas horas, el alerta es máxima en el gobierno y los municipios a causa de estos intentos de saqueo. Los cuerpos especiales de la Policía están todos en acción o en disponibilidad. Desde la Dirección de Investigaciones, pasando por los "Halcones", división tecnológica, Inteligencia, Infantería... incluso han sobrevolado con drones las zonas de ataque. Los fiscales del MPF están en plena investigación. Sin embargo, luego de por lo menos media docena de intentos de saqueo muy graves y de los incidentes de ayer en Tunuyán, en los poderes del Estado no hay una idea concreta respecto de la matriz de estos ataques. Sólo, que algunos de estos grupos están muy organizados. Y que no parecería, por estas horas, haber detrás de ellos organizaciones políticas, sociales o sindicales. Aunque algunos de los detenidos sí tendrían filiación. Lo que sí está claro es que se está generando un "caldo de cultivo" muy complicado, muy espeso, que podría ser el disparador de una escalada mucho mayor. Ya sea por la crisis económica, social, de representatividad, o el "Que se vayan todos" que empezó a sonar otra vez, especialmente desde que el candidato a presidente de la Nación de La Libertad Avanza Javier Milei, lo adoptó como propio. Ayer mismo, entrevistado por Eduardo Feinmann en La Nación +, el intendente de Guaymallén Marcelino Iglesias intentó transmitir un mensaje pacificador. El horno no está para bollos.

En el Gran Mendoza, norte y Este hay unas 80.000 familias que son asistidas con alimentos de modo directo, ya sea por el Estado nacional a través de oficinas o de las organizaciones sociales que les reportan y manejan cientos de planes, los municipios que tienen una dinámica propia de compras y reparto de mercadería, y la provincia. Pero los intentos de saqueo ocurridos desde el sábado no parecen tener la forma habitual de quienes necesitan bolsones de alimentos. "No es la manera en que funciona esto... Lo que estamos viendo es que se organizan por WhatsApp a través de grupos formados por personas que no tienen antecedentes, en la mayoría de los casos, ni militancia conocida... Después van a los barrios donde no los conocen, les calientan la cabeza a la gente y arrancan. Sobre todo, con muchos pibes... menores de edad... yo no miraría para el lado de la izquierda, sino para el otro lado..." advierte una fuente del gobierno que conoce bien el entramado de ayuda social que se reparte en la provincia. Un dato: Ningún intendente pidió por estas horas "refuerzos" de bolsones de comida a la provincia. La mayoría está bien provisto. Algunos hicieron compras llamativas, como la municipalidad de Las Heras, que adquirió hace poco 15.000 bolsones para repartir antes de las elecciones del 24 de septiembre, por 120 millones de pesos. Es para asistir a unas 60.000 personas y la compra anterior, en mayo, había sido casi diez veces menor. Igual, no alcanzó para apagar la mecha. Los hechos más graves del sábado ocurrieron en ese departamento, donde el intendente Daniel Orozco organizó un "Comité de Crisis" del que se distribuyeron fotos, pero nada se sabe de las medidas que tomaron. Los incidentes en Las Heras no sólo ocurrieron en las sucursales de Átomo y en la carnicería de Independencia y Alvarez Condarco. Un grupo de personas que se organizó para saquear un Átomo en El Algarrobal fue repelido por policías apostados en el lugar. En la disparada, los vándalos arrasaron la feria local, donde la gente vende lo que puede, pero especialmente ropa.

La matriz de estos sucesos no está clara. Un funcionario del gobierno provincial descartó de plano la participación de organizaciones locales, por lo menos, de las que mayor poder de movilización tienen. "El Polo Obrero te aseguro que no fue... Saquear está en contra de su propia filosofía..." dijo otra fuente oficial. Justamente este jueves podría ser un día caliente. La izquierda y la Unidad Piquetera marcharán en las principales capitales del país demandando un 100 % de aumentos en planes y asignaciones, y más cantidad de asistencia a comedores que regentean por miles en todo el país.

Luego de los incidentes del sábado, el domingo transcurrió en paz. Pero ayer lunes feriado en el Gran Mendoza muchos comercios atendieron con las persianas semi cerradas, o con límite a la cantidad de personas que podían ingresar. Uno de los que operó de este modo fue el Átomo de Elpidio González y Urquiza, en Guaymallén. 

El miedo fue palpable ayer en empleados y clientes. De todos modos, los incidentes graves se trasladaron a Tunuyán. Empezaron por uno de los ingresos, sobre la Ruta 40, y siguieron alrededor de un asentamiento y luego en pleno centro, con escenas increíbles. Las redes están plagadas de videos de policías correteando a pibes y muchachones por el centro de Tunuyán, a pura bala de goma. La tarde violenta se saldó con una decena de detenidos y tres policías heridos a pedradas.

Los hechos de Tunuyán fueron extraños de verdad. Cerca de las cuatro de la tarde, un grupo de personas que iban de sesenta -según la información oficial- a doscientas, cortó la Ruta 40 en el ingreso desde el sur, cerca de un descampado y del asentamiento Las Tablitas. A unos 200 metros hacia el norte, cerca del cruce con la calle La Argentina, hay una sucursal de supermercados Átomo. La policía llegó enseguida al corte, luego se sumaron tres gendarmes. Un tal Sergio Pinto, de 44 años, árbitro de fútbol amateur, empleado del municipio local y sereno del cementerio de Tunuyán, estaba al frente de los que cortaban la ruta pidiendo "alimentos" por la crisis económica. La discusión se fue caldeando. Hubo comunicaciones con funcionarios de la Municipalidad, que se negaron a cualquier negociación en tanto los manifestantes estuvieron sobre la ruta. "Los conocemos de las gestiones en el municipio. A muchos los vemos todos los días tramitando bolsones, colchones, chapas o la tarjeta Alimentar... a todos los atendemos" dijo una fuente. Los funcionarios ayer seguían órdenes de Martín Aveiro, el intendente de Tunuyán que además encabeza la lista de diputados nacionales del PJ para las elecciones generales de octubre. Al tal Pinto -hoy le iniciarán un sumario en la Municipalidad- lo acusan de incitar un intento de saqueo en el Átomo, lo que no alcanzó ni a empezar, porque alguien le bajó los dientes de un piedrazo al auxiliar de policía Diego García, y empezaron las más de dos horas de desbande. La policía trazó una "línea" para evitar que desde el asentamiento se volviera a ingresar a la ruta o acercarse al supermercado. Más tarde, los incidentes se trasladaron al centro. La policía estaba apostada en la sucursal de Supermercados Vea de San Martín y Brandsen. Primero, había una protesta por las detenciones, que luego se generalizó cuando grupos de personas -muchos de ellos pibes, menores de edad evidentes- amagaron con entrar al Vea. Los dispersaron a balazos de goma. El intendente Aveiro estuvo en contacto y coordinación con el ministro de Seguridad Raúl Levrino. Seguía los acontecimientos desde el centro de monitoreo, donde estuvieron hasta la noche. 

Funcionarios del ministerio de Seguridad viajaron a Tunuyán para analizar lo ocurrido en el terreno. La decisión fue aplicar el máximo rigor de la ley y no negociar nada. Anoche esperan una orden de allanamiento y la probable detención del sereno Sergio Pinto y un hermano menor, que estuvieron en el corte de la Ruta 40, aunque no está claro si participaron de los incidentes posteriores.

[Video: Resumen de los incidentes de Tunuyán]

Desde el Gran Mendoza, los intendentes siguieron los acontecimientos con preocupación, en contacto con los policías locales y con sus propias áreas sociales. Todos saben lo que ocurrió en 2001 y nadie quiere que se repita. Tampoco en los municipios hay mayores datos sobre la fuente real de este tipo de "intentos de saqueo" que de momento la policía ha logrado repeler. "Para mí, hasta ahora son delincuentes comunes... muchos con antecedentes..." dice uno de los jefes comunales al Post, y admite la preocupación plena por la situación social. La devaluación de la semana pasada generó una fuerte remarcación de precios, que entre familias que viven "al día" significa la diferencia entre comer o no comer.

Hubo algunos intentos de vincular estos hechos a la discusión política que se vive en Mendoza por estos días. Militantes y candidatos radicales hicieron circular un video en el que se ve al ex concejal peronista lasherino Roberto Lucas, incluso con la misma remera y horas de diferencia, en un acto con Omar De Marchi y sumándose a La Unión Mendocina, y luego, en la puerta de la carnicería de Javier Mignani. Pero resulta que Lucas -que es proveedor del municipio lasherino- trabaja desde hace años para Mignani, dato confirmado al Post por el propio dueño de la carnicería. A Lucas lo vincularon a los saqueos de 2001, cuando punteros que le respondían fueron detenidos el 16 de diciembre de ese año por el saqueo a una sucursal de Átomo. El ex concejal Lucas aparece cada tanto en los medios rodeado de alguna polémica. Tanto Alfredo Cornejo como Rodolfo Suarez le negaron beneficios de ex presos de la dictadura, aduciendo que no lo correspondían. Y en marzo de 2021 cuando sólo se vacunaba contra el Covid-19 a personal de Salud y esencial, Lucas apareció vacunado con una dosis de Sputnik en el Hospital Carrillo. Hubo un sumario por esa inoculación, que habría sido un "error". Es cierto que Lucas es un personaje complejo de la política lasherina. Pero no tuvo que ver con estos intentos de saqueo ni con el robo en poblado y en banda a la carnicería de Mignani.

Hay que esperar el avance de los investigadores y de los fiscales, para entender un poco más la matriz de estos incidentes. Es cierto que algunos de los grupos que actuaron en este fin de semana largo parecieron estar muy coordinados y organizados. Y que en todos los casos usaron menores de edad y algunas mujeres. Pero eso no alcanza para llegar al nudo de la cuestión. Ello podría suceder en semanas, cuando desentrañen la red de comunicaciones de los organizadores de grupos que se convocaron por mensajería, para estos "intentos" de saqueo que -de momento- han sido rechazados. Ayer en Tunuyán, la resistencia del Estado fue a un costo alto de incidentes, destrozos, y heridos. La subcomisaria del Cordón del Plata, Jenifer Arce, sufrió traumatismos varios; el auxiliar Diego García sufrió un traumatismo facial; y el auxiliar superior Sebastián Baez sufrió una herida cortante debajo del ojo izquierdo, de acuerdo a información oficial distribuida por el Ministerio de Seguridad.

Pasados tres días más dos de "organización" de la que la policía tenía datos, todavía no se sabe bien quiénes son, qué quieren, por qué buscan desestabilizar, a quién o quiénes responden estos saqueadores versión 2023, si es que tal cosa existe. Nadie descarta que se trate de grupos absolutamente anárquicos, marginales, con ganas de sembrar el caos aprovechando la crisis. Sin importar a quién votaron el domingo 13.

(Foto de cabecera: Ingreso restringido en un Átomo de Las Heras, ayer domingo. Como en la pandemia.)