Qué es lo bueno, qué es lo malo y qué, lo neutro en la discusión interna del radicalismo y que se extiende por todo el frente opositor que por ahora se sigue llamando "Juntos por el Cambio".
Cómo queda Cornejo tras las internas radicales
Ganaron algunos adversarios de Alfredo Cornejo en las internas radicales de Córdoba, Buenos Aires y territorio bonaerense. Pero también, perdieron algunos de quienes le disputan el liderazgo. Y algo más para terminar de enredar la madeja: Cornejo también se anotó un triunfo en todos los procesos de elección de autoridades partidarias de la UCR, fuerza que preside hasta fin de año.
Hasta aquí, una mirada desde su nombre y su aspiración de lograr hacer pie en la disputa nacional, algo que no resulta jamás sencillo para un dirigente del país, aunque llegue desde plebiscitarse en su territorio con éxito.
El mendocino más importante del radicalismo juega en tándem con Martín Lousteau y, por las dudas, ambos dejan que se les mencione como presidenciables. Sin embargo, el exgobernador analiza los resultados convenientemente como un triunfo de las fuerzas que sostienen a Juntos por el Cambio y algo más importante para que vuelva a ser opción: su renovación de nombres, la disputa para buscar más de una figura relevante y superadora de la experiencia con Mauricio Macri y la ampliación de la base de sustentación.
Visto desde allí, los únicos grandes derrotados fueron aquellos que se oponen a la idea de gobernar y apuestan a aquel típico "radicalismo cajetilla", que se sentía cómo perdiendo y cuyos dirigentes se turnaban para ocupar los primero lugares de las listas y ser, en definitiva, los que eternamente cortaban el bacalao.
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