El presidente llegará el miércoles a nuestra provincia. Aún los peronistas locales se preguntan cuál es la verdadera motivación de su imprevista incursión en territorio adverso. Una guía para entender por qué y para qué viene.
El escenario es del tío Alberto: explicador de la no esperada visita a Mendoza
Como si fuera el pariente que viene de CABA de vacaciones, que llega y ve a Mendoza con mirada asombrada. Así es Alberto Fernández en gira veraniega por lo que él, en su interior, sigue creyendo lo que es el resto de este país, saliendo de Buenos Aires: precisamente el "interior". Es el tío porteño que se autopercibe y declama ser argentino y federal.
Esta mirada localista y con riesgo de ser catalogada de resentida, es el prólogo de esta descripción de lo que ocurre previamente, y qué podría pasar el miércoles 18, cuando el presidente de la Nación en ejercicio de sus atribuciones llegue a nuestra provincia en plena época vacacional. Será justo cuando ya haya regresado de la costa argentina el gobernador radical Rodolfo Suarez quien recibirá a Fernández junto al ministro de Infraestructura local Mario Isgró. Dicho sea de paso, el presidente vendrá acompañado por el ministro de Obras Públicas Gabriel Katopodis.
El presidente viene recorriendo varias provincias, más allá de extenso territorio bonaerense y va dejando ciertas señales que frecuentemente son desdeñadas porque la figura política presidencial sufre el deshilache del transcurso del tiempo signado hace más de un año por la inflación, el peor de los impuestos que soportamos quienes habitamos este territorio.
El peronismo mendocino -kirchneristas y no (a esta altura se hace necesaria hacer la distinción en Mendoza)-, menosprecia a Alberto. Mujeres y varones partidarios lo hacen en el sentido estricto del verbo, le bajan el precio. También hay quienes amplían el concepto y lo desprecian, políticamente hablando.
Lo que sí es cierto es que la cotización del presidente cayó de manera vertical para el público mendocino desde que el 5 de junio de 2020 se declaró virtualmente "pampeano" en la discusión por Portezuelo del Viento, aunque en aquella oportunidad haya confundido el río Grande con el Atuel. Se trata de aquella la obra hidroeléctrica que él mismo "mató" con un laudo antes del final de 2022 donde hizo lo que el gobernador patagónico Sergio Ziliotto le pidió, a cambio de su apoyo en las mesas nacionales partidarias, en las peleas con el macrismo y con los jueces.
Quincho: Arde Cambia Mendoza, y peronistas desdoblan la semana que viene
Entonces insistimos: ¿por qué viene? ¿para qué? ¿qué dicen los peronistas de Mendoza? Aquí daremos pistas de sus propósitos y de las consecuencias que pueden darse de esta incursión presidencial en medio del último enero de su mandato.
Alberto viene por...
• Porque los indicadores macroeconómicos están dando señales de leve recuperación. Eso lo energiza y cree ser él la causa de parte de este momento, aunque los formadores de opinión entiendan que es Sergio Massa el artífice de estas señales de incipiente recupero. Alberto quiere hacer valer su traje presidencial desteñido por el desgaste y por su propia impericia en el cargo al que llegó por acuerdo con Cristina Fernández que siempre le marcó la cancha. El compás que marcó el radio de giro del presidente siempre lo tuvo la vice.
• Porque se ha empecinado aún más, en recorrer las provincias sembrando la antinomia con Mauricio Macri, intentando acentuar la polarización, la grieta tan imperiosa para que ambos sectores predominantes existan. Nos referimos al kirchnerismo y sus subsidiarios contra el macrismo de primera y segunda generación.
• Porque cree que todavía tiene posibilidades de impulsar su propia candidatura como presidente, esta vez sin el cepo K.
Alberto viene para...
• Para inaugurar la ampliación de la planta de tratamiento de líquidos cloacales del Gran Mendoza ubicada en El Paramillo un paraje de Lavalle. Una obra demorada, pero necesaria porque aumenta el caudal de efluentes a tratar desechados por 680 mil personas que viven en el conglomerado más grande de la provincia.
• Para habilitar las obras que le faltaban al edificio de la cárcel federal ubicada en Campo Cacheuta en Luján de Cuyo cercana a la ruta 7. Entre las varias deficiencias de ese lugar de encierro los abogados penalistas tienen presente los serios problemas de provisión de agua para el personal penitenciario y las personas privadas de la libertad. Las perforaciones de agua subterránea se "secaron" rápidamente y se racionalizó la provisión a límites cuestionados legalmente.
• Para observar algunas obras viales en ejecución. La doble vía a San Juan, y la variante Palmira-Agrelo en especial. En la obra de la diagonal que vinculará las rutas nacionales 40 con la 7 pensada para agilizar el transporte de carga pesada hay un problema que hay que solucionar prontamente. La obra está frenada en el nudo de Agrelo porque hay dos empresas que se resisten a negociar razonablemente, dicen desde Vialidad Nacional, a la entrega de terrenos que permitan que las tareas avancen. El jefe local de VN, el lasherino Guillermo Amstutz espera una orden de expropiación de esas parcelas y esa medida la tiene que impulsar Fernández.
La visita de Alberto significa para el PJ mendocino...
• Un lastre político, que hay que aplicarle el frio de la indiferencia para no perder el menguado caudal electoral.
• Un estimulador para reactivar al partido y comenzar movilizar y salir de la resignación que frena cualquier intento de armado electoral.
• Un escenario propicio para la intendenta de Santa Rosa y presidenta del PJ, Flor Destefanis junto a sus colegas, Fernando Ubieta de La Paz, Roberto Righi de Lavalle, Emir Félix de San Rafael, Matías Stevanato de Maipú, y Martín Aveiro de Tunuyán, para que confirme el adelantamiento de las respectivas elecciones municipales, Esa definición se oficializará el lunes 23, de acuerdo a lo contado en El Quincho del POST, hoy domingo 15.
• Un escenario que será aprovechado por el intendente Righi para explicar su idea del recorrido que debe hacer el peronismo local para ser una opción válida para quienes tengan que votar este año y elegir quién gobernará Mendoza entre 2023-2027. Righi tiene en mente proponer armar un plan de gobierno que busque refuncionalizar el Estado ("tenemos un Estado bobo", dice con frecuencia) y generar normas que ayuden al sector privado a desarrollarse. Quiere ordenar estos lineamientos y ubicarlos sistemáticamente como proyecto de gobierno. Son las ideas que ha expresado en los últimos años en base a su experiencia de más de dos décadas como intendente de Lavalle.
En campaña: Alberto llegará a Mendoza para inaugurar una planta cloacal