Alberto Fernández intentó bajar la tensión entre el Gobierno Nacional y la Asociación del Fútbol Argentino tras los festejos de este martes y la trunca recorrida del plantel campeón del mundo.
Alberto y el desplante de la selección: "Estaban muy cansados, es entendible"
En un contexto de tensión entre el Gobierno Nacional y la Asociación del Fútbol Argentino, el presidente Alberto Fernández intentó poner paños fríos en la disputa y dijo que las celebraciones de ayer fueron "una fiesta popular como nunca hemos visto en la Argentina" y señaló que "el homenajeado no era el presidente sino los jugadores" de la selección argentina campeona del mundo.
"Se hizo todo en clima de mucha tranquilidad, armonía y paz; no hubo excesos ni abusos", dijo el Presidente en declaraciones a la FM Radio Con Vos y agregó: "Yo lo único que hice fue hacerles saber a las autoridades de la AFA que tenían la Casa de Gobierno a disposición, y ellos eligieron otra cosa y es muy respetable; ayer el homenajeado no era el Presidente sino los jugadores, así lo interprete siempre".
El mandatario nacional contó que la decisión final la terminó tomando la Asociación y que todo se desarrolló de acuerdo a lo que pidió la casa madre del fútbol argentino. "El objetivo estuvo cumplido", remarcó.
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"Si los jugadores no pudieron llegar a la autopista 25 de Mayo para saludar, puede ser una frustración que vive la AFA y la selección; pero si uno mira la alegría que hubo en la calle, el objetivo estuvo cumplido", remarcó.
"La selección argentina campeona del mundo es de todos, no del Frente de Todos, ni de la oposición. Lo que quería simplemente era que vieran y recibieran la alegría del pueblo y se reconfortaran con el cariño y eso lo logré. Esa es mi alegría. Para ver o hablar con Messi o Scaloni habrá tiempo, pero ahora el tiempo es de ellos", finalizó.
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