Gustavo Córdoba dijo que la gestión del Presidente ha perdido gran parte de su credibilidad, fundamentalmente en Mendoza, en parte por el mal manejo de la información. Analizó a los posibles presidenciables de 2023.
Un encuestador dijo que Alberto "toca de oído" los temas sensibles
El analista y encuestador Gustavo Córdoba se refirió al anuncio que hizo este lunes el presidente Alberto Fernández sobre la ampliación del Túnel Caracoles, en el cruce fronterizo con Chile. El proyecto data del año 2018, durante el gobierno de Macri. Ya se encuentra en ejecución y en su discurso, el mandatario lo confudió con el Paso Cristo Redentor.
En conversación con el programa Te digo lo que pienso que conduce Ricardo Montacuto por radio Nihuil, Córdoba dijo que "no es el primer episodio de descontextualización del presidente. Ya hemos visto desde el caso Vicentín, como punto visagra, hasta hoy, distintos episodios que hablan de una falta de profesionalismo y falta de minuciosidad en el manejo de la información que pasa por la oficina del mandatario. Es imperdonable que un presidente tenga este manejo de su comunicación".
"Anteriores presidentes también tuvieron el problema de pararse en obras que fueron de sus antecesores, pero en el contexto actual, suena un poco más inflamante, porque, claramente vemos una gestión que ha perdido gran parte de su credibilidad y particularmente en Mendoza, donde su nivel de credibilidad es realmente bajo si uno lo compara con el resto del país", destacó el analista.
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El encuestador explicó que no existen problemas de comunicación en la política, sino que existen problemas políticos. "Porque, inclusive una buena comunicación jamás podría salvar una mala gestión. Es muy grave el problema político de lectura del contexto, sobre todo", apuntó.
"En el comienzo de la pandemia, Alberto Fernández tenía un consenso precario, es decir, la gente le daba apoyo relativo, apoyo en la medida en que saliéramos rápido de la situación. Pero el gobierno en lugar de entender que el apoyo era precario, entendió que era un apoyo irrestricto y ahí, creo, empezó una cadena de errores que hasta el día de hoy sigue. Por ejemplo, el caso Vicentín, fue a todas luces un error grosero, respecto a la forma de aproximarse a la solución del problema, o por ejemplo, la foto de Olivos, crisis que tiene el gobierno de Alberto y que todavía no ha cerrado, porque el último intento de cerrarla poniendo plata, no hizo más que reavivar el descontento de la mayoría de la población", recordó.
Gustavo Córdoba señaló que "la política se manifiesta en formato comunicacional y en ese formato es donde el gobierno ha cometido todos los errores. Ahí hay que agregarle la pelea interna en el Frente de Todos, y esta imposibilidad de generar consensos, no solamente hacia afuera, sino hacia adentro. Hasta las políticas más pequeñas del gobierno son intensamente discutidas, y no hay avances ni acuerdos, entonces, tenemos un gobierno que en lugar de tomar decisiones rápidas, tarda demasiado y cuando toma las decisiones, ya es tarde y encima con mal información, entonces es realmente complejo el panorama".
"Si uno pregunta ahora a la sociedad sobre su sentimiento respecto de la política, el 80% tiene sentimientos negativos respecto de la política. Porque venimos acumulando la mala resolución económica del gobierno de Macri y la actual mala resolución económica con una inflación desbordada. Entonces, son dos gobiernos de signos ideológicamente opuestos y lograron prácticamente el mismo resultado que es la frustración de los que los votaron. Por lo tanto, es entendible el sentimiento de la sociedad, lo que es inentendible es la ignorancia de la dirigencia respecto de este sentimiento".
Agregó que, a su entender, la política hoy hace como que está en otro mundo. "Están discutiendo candidaturas que solo a ellos les importa, o el tema del Consejo de la Magistratura, pero el real problema de la Argentina es que es una fábrica de pobres y más frustración porque millones de argentinos no llegan a fin de mes. Cuentapropistas y comerciantes que no tienen productos, no tienen precios. Es realmente un problema gigantesco y vemos un gobierno que acumula esta inercia de no saber o no poder resolver la cuestión inflacionaria".
¿Cristina y Macri presidenciables en 2023?
El encuestador opinó que "si viésemos a la política argentina en términos de primera vuelta, obviamente Macri y Cristina son los reyes de la primera vuelta. Pero, al mismo tiempo, creo que hay que empezar a ver a la política en términos de la segunda vuelta electoral porque hoy no hay fuerza que pueda ganar en primera vuelta. Al menos, no todavía.
En términos de segunda vuelta, el exceso de pasado complica a Macri y a Cristina, porque tienen un pasado muy pesado, muy parecido al de Menem en la elección de 2003, cuando tuvo que bajarse en segunda vuelta porque no le daban los números para ganar. Creo que es lo que hoy le podría pasar a Cristina Fernández cuyo piso y techo electoral es prácticamente el mismo, cerca del 30% y lo mismo le puede pasar a Mauricio Macri".
También remarcó que "hoy hay pocos dirigentes que en la Argentina tienen diferencial como para ir a una segunda vuelta un poco más livianos. Por ejemplo: Facundo Manes, Patricia Bullrich, y Horacio Rodríguez Larreta. Del oficialismo, me cuesta ver a alguien en este momento porque todos tienen, en general, un nivel de rechazo tan alto, que en términos electorales, eso significa que en una segunda vuelta, sacarían lo mismo que en una primera", indicó.
"Si este gobierno no logra controlar la inflación, la chance electoral de Scioli, Maza, Alberto, Cristina o de Manzur, va a correr la misma suerte. En este caso no depende de una cuestión individual sino de un contexto económico que todavía no es favorable al gobierno. Pero, todavía le queda tiempo, aunque los márgenes son muy escasos.
¿Puede aparecer un cisne negro?
"Es muy difícil. Argentina es un cementerio de terceras fuerzas. Históricamente, todas las terceras fuerzas han sido absorvidas por las dos principales. Lo de Javier Milei, ha sido un formato más cercano al sentimiento negativo respecto de la política, que a la política en sí. Es decir, era mucho más atractivo el formato comunicacional de Milei, su insulto a la clase política, que las propias ideas del libertario".
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