El gobierno oficializó la decisión que obliga a los gremios a asegurar un mínimo del 50% del servicio.
Es oficial: volar en avión también es un servicio esencial
Este lunes quedó oficializada la declaración de la aeronáutica civil y comercial como servicio esencial, tras la firma del decreto 825/2024 por parte del presidente Javier Milei.
El decreto establece los lineamientos para regular los conflictos laborales en este sector clave, buscando garantizar la continuidad de los servicios aún en medio de medidas de fuerza sindicales.
La norma establece que cualquier medida de acción directa que interrumpa total o parcialmente las actividades aeronáuticas, tanto públicas como privadas, quedará sujeta a esta nueva normativa. Las partes involucradas en un conflicto deberán notificar con cinco días de antelación cualquier intención de realizar medidas de fuerza y, una vez cumplido este plazo, se dispondrá de 24 horas para que las partes acuerden los servicios mínimos a mantener durante el conflicto.
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Si las partes no logran un acuerdo sobre los servicios mínimos, la Autoridad de Aplicación tendrá un plazo de 48 horas para establecer dichos servicios, que no podrán ser inferiores al 50% de la actividad regular.
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El decreto 831/2024, que regula estos servicios esenciales, fue desarrollado en conjunto por el secretario de Trabajo, Julio Cordero, y el ministro de Desregulación, Federico Sturzenegger.
Como era de esperar, los gremios aeronáuticos reaccionaron calificando la decisión de "arbitraria e ilegal". En un comunicado conjunto, sindicatos como la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) y la Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA) advirtieron sobre las posibles consecuencias legales para los funcionarios responsables de la medida. Estos gremios argumentan que el transporte ya está regulado como servicio público de trascendental importancia, amparado por la ley 25.877, que regula el derecho de huelga.
Pablo Biró, titular de APLA
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