Este domingo habrá elecciones internas en el PRO de Mendoza, que está intervenido desde el año pasado. Se enfrentan las listas de Hebe Casado y la de Gabriel Pradines, este último impulsado por Omar De Marchi.
A 3 días de la interna, en el PRO se pelean por los veedores
Este domingo, después de idas y vueltas y planteos que tuvo que resolver la Justicia Electoral, finalmente habrá elecciones internas para definir las autoridades del PRO en Mendoza (si no ocurre nada raro a último minuto). Sin embargo, pese a la proximidad de los comicios, aún hay cuestiones sin resolver, como la presencia de veedores.
La lista amarilla, que lleva a la vicegobernadora Hebe Casado como candidata a presidenta del PRO, pidió que haya veedores judiciales en cada una de las 24 escuelas en las que se votará el domingo. Sin embargo, la Junta Electoral, controlada por el sector de Omar De Marchi, por ahora aceptó que haya uno por distrito electoral, es decir, apenas 4 veedores judiciales para toda la provincia.
"La Lista Amarilla considera que la presencia de veedores judiciales en todos los centros de votación es fundamental para garantizar la transparencia y confiabilidad del proceso electoral interno del PRO", señaló el sector de Casado en un comunicado.
Por otra parte, el juez electoral Pablo Quirós fijó el canon que habrá que pagarle a cada uno: $185.000, con excepción de los asignados a San Rafael, Malargüe y General Alvear, "correspondiéndole el doble de dicha suma en razón de la distancia"; es decir, $370.000 a cada uno, más viáticos.
Otro tema que generó controversia fue la decisión de la Junta Electoral del PRO -conformada por 3 miembros del sector de De Marchi y 2 de Casado- de no contratar a ninguna empresa de correo ni logística para el traslado de urnas y el escrutinio final, dándoles esa responsabilidad a las autoridades de mesa.
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De acuerdo con manifestaciones de los integrantes de cada una de las listas, si gana el sector de Casado se garantizará la continuidad del PRO en Cambia Mendoza. Si triunfa la lista de Pradines-De Marchi, el partido romperá la alianza con la UCR y probablemente terminó en La Libertad Avanza.