Dos jóvenes hermanas perdieron la vida por el impacto del Audi A3, que era conducido por un joven en estado de ebriedad.
Imprudencia y alcohol, la previa del trágico accidente de Lanús
Los jóvenes que protagonizaron el fatal choque en Lanús, en que fallecieron dos jóvenes hermanas, se filmaron tomando alcohol minutos antes y mientras conducían a alta velocidad. Las impactantes imágenes trascendieron y dieron cuenta de los instantes previos a las 3:30, hora en que se produjo el impacto del Audi A3 contra un comercio ubicado en la esquina de la Avenida Presidente Bernardino Rivadavia y Viamonte, en la localidad de Villa Industriales.
Bebiendo, conduciendo a altísima velocidad por calles de un barrio y con música a todo volumen. Eso es lo que quedó registrado en el video que filmaron los jóvenes que habían salido de fiesta y que terminaron protagonizando una tragedia que le costó la vida a dos jóvenes hermanas, de 22 y 26 años, que viajaban dentro del vehículo de alta gama. Tras el impacto contra una agencia de lotería, el test de alcoholemia realizado al conductor del Audi A3, un joven de 27 años, dio positivo.
La ingesta de alcohol antes de conducir un vehículo está totalmente desaconsejada, ya que incrementa el riesgo de sufrir un incidente vial y la probabilidad de que éste tenga un desenlace mortal o cause traumatismos graves.
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Según advierte la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV), el alcohol produce importantes efectos sobre la visión: la acomodación y la capacidad para seguir objetos con la vista se deterioran, incluso con niveles bajos de alcohol en sangre. Además, afecta la coordinación y la atención, y aumenta el tiempo que una persona tarda en decidir qué debe hacer o cuándo actuar. También provoca falso estado de euforia, seguridad y confianza en sí mismo: aparece un desprecio por el peligro y una tendencia a transgredir las normas.
La alcoholemia, que es la cantidad de alcohol por litro de sangre en un individuo, está directamente relacionada con la cantidad y tipo de bebida que se tome. Si bien el límite es de 0,5 g/l, se debe tener en cuenta que concentraciones menores también aumentan el riesgo de posibles incidentes viales.
En los últimos años distintos proyectos de ley ingresaron al Congreso de la Nación para establecer la "tolerancia cero" de alcohol en los conductores, algo que se implementa en algunas provincias.