Se llama Filadelfia y está liderada por "la Tía Eva". Tenían base en varias provincias, entre ellas Mendoza. Los niños eran dados en adopción. Están acusados de trata de personas, abuso sexual entre otros aberrantes delitos.
Cayó una secta con presencia en Mendoza que secuestraba bebés
El operativo desplegado durante la madrugada finalizó con siete detenidos y el rescate de 69 víctimas. En total, se realizaron 23 allanamientos en las provincias de Buenos Aires, Salta, Tucumán, Mendoza, Neuquén y Entre Ríos.
Según surge de la investigación, entre los delitos registrados, las y los miembros de la "comunidad" sustraían menores a sus padres biológicos para inscribirlos luego como hijos de varias mujeres de la organización. Además, se pudo establecer que la organización cometió instigación al suicidio al haber inducido a la muerte a un joven que se había reconocido como homosexual, hecho por el que sufrió permanentes hostigamientos y agresiones que finalizaron con su trágico suicidio. Siempre bajo "la palabra divina", el joven había sido obligado a desnudarse públicamente, fue golpeado y sufrió agresiones físicas (como arrojarle baldes de agua fría), entre otras atrocidades.
Gracias a la articulación entre las órdenes del Poder Judicial y las directivas de la ministra Frederic de intensificar la investigación criminal para neutralizar el delito complejo, sumado a la asistencia de la Procuraduría de Trata y Explotación de Personas (PROTEX) del Ministerio Público Fiscal, se logró extender el despliegue de las fuerzas para realizar un operativo de gran envergadura en diferentes puntos del país, lo que muestra, entre otras cosas, la dimensión que poseía la organización criminal desbaratada.
Ver: Un hombre se ahogó en una pileta de residuos de aceitunas en San Martín
Al respecto, el secretario de Seguridad y Política Criminal, Eduardo Villalba, sostuvo: "Estamos muy satisfechos y vamos a redoblar los esfuerzos en este tipo de investigaciones para desbaratar el delito complejo. Quiero remarcar el trabajo en conjunto entre el personal de las fuerzas, funcionarios del Ministerio y autoridades judiciales que permitió una investigación que seguramente tendrá mucha tela para cortar".
Ver: El joven quemado de La Paz contó cómo lo prendieron fuego en un calabozo
Junto a Frederic y Villalba estuvo el subsecretario de Intervención Federal, Luis Morales. Además, en representación de la PFA asistieron el jefe y el subjefe de la fuerza, Juan Carlos Hernández y Osvaldo Mato; y las máximas autoridades de la Superintendencia Federal de Intervención Territorial, Pablo Daniel Moreno, de la Superintendencia de Investigaciones Federales, Gustavo Acero, y del Departamento Unidad de Investigación de Trata de Personas, Dardo Castro.
La investigación
A raíz de un operativo realizado en 2019 por la Policía de la Provincia de Buenos Aires se inició una exhaustiva investigación que, en aquel momento, concluyó con varios allanamientos por los delitos de trata de personas y lavado de dinero. En ese entonces, se comprobó que la organización criminal operaba con un minucioso sistema de captación de personas para, posteriormente, explotarlas laboralmente y someterlas a la servidumbre.
El personal de GNA y de PFA, junto con el Juzgado Federal en lo Criminal y Correccional Número 3 de Morón, a cargo del Dr. Juan Pablo Barral, secretaría Número 9 de la Dra. Mariana Sioli, continuó con la pesquisa a partir de reiteradas denuncias que realizaron las víctimas y detectaron que aquella organización criminal, además de los delitos ya mencionados, también era responsable de otros graves crímenes.
El grupo, oculto bajo una presunta vocación religiosa, comenzó sus actividades en el país entre 1972 y 1973 y estaba liderado por "la Tía Eva" y dos cómplices a quienes se las acusa, hasta ahora, de dos abusos sexuales (en el marco de acciones "religiosas" con el objetivo de "evitar el pecado") contra, por lo menos, un menor. Dado su forma de actuar y el modus operandi, este tipo de hechos se fueron reiterando a lo largo de los años.
Ver: Qué atenta contra el comienzo de clases presenciales el 1 de marzo
Con un "templo" principal emplazado en el Gran Buenos Aires y "anexos" en varias provincias y, según se presume y aun se investiga, en Brasil y Paraguay, captaban personas en distintas partes del país. Centralmente, esas captaciones eran realizadas sobre niñas y niños en situaciones de pobreza y vulnerabilidad. Bajo una "persuasión coercitiva" les hacían creer que la líder de la organización era una persona con un poder supraterrenal. Una vez cooptados, eran obligadas y obligados a vivir en condiciones deplorables, carentes de higiene y con una alimentación degradante. Las y los cooptados no se podían comunicar con sus familias, no se les permitía ir a la escuela y quedaban, además, sin su documentación personal. También eran obligados a trabajar en una panificadora que poseía la organización.
El caso
Tras la investigación que pudo establecer esta sucesión de delitos, en la madrugada de hoy la Policía Federal Argentina y la Gendarmería Nacional realizaron los 23 allanamientos en las sedes que la organización tenía en todo el país y en propiedades vinculadas al grupo criminal, tras lo que se labraron 10 órdenes de detención para las y los integrantes del núcleo duro del grupo, incluyendo a quienes estaban prófugos desde el año pasado. Entre los detenidos figuran seis miembros de la primera línea de la organización criminal.
Hasta el momento, las 69 personas rescatadas están siendo entrevistadas y asistidas por el personal del Programa Nacional de Rescate y Acompañamiento, de modo de recabar más información, que será de vital importancia para el desarrollo de la causa judicial.
Por otro lado, y en el marco de la misma causa, se dio la orden de dar de baja en el registro de cultos a esta organización y se informó de la situación a las autoridades de Brasil y Paraguay, donde se presume que existen sedes de este grupo. Como ya se mencionó, interviene el Juzgado Federal en lo Criminal y Correccional Número 3 de Morón, a cargo del Dr. Juan Pablo Barral, Secretaría Número 9 de la Dra. Mariana Sioli.
Además de las y los 250 miembros de la GNA, trabajaron en los allanamientos 389 efectivos de las Superintendencias de Agencias y Delegaciones Federales; de Tecnología de la Información; de Científica; de Bomberos y de la Dirección General de Fuerzas Especiales y orden urbano de la PFA.