Roberto Bustos (65) integraba la organización dedicada a la comercialización clandestinada de divisas. Quedan dos prófugos, mientras hay diez detenidos, entre ellos el jefe de la Policía Federal en Mendoza, Dino Rossignoli, dueños de joyerías y agentes y ex policías.
Se entregó uno de los prófugos por la causa de coimas en las cuevas de Mendoza
Este martes cerca del mediodía se entregó uno de los prófugos, eran tres en total, de la banda de las cuevas cambiarias que fue desbaratada en Mendoza. El ahora detenido es un hombre de 65 años cuya función en la organización era brindar seguridad para que se pudieran llevar adelante las operaciones clandestinas.
Roberto Bustos (65), alias "Poroto", se presentó junto a su abogado en los Tribunales Federales de calle España. Sobre él pesaba una orden de captura luego de las detenciones de nueve integrantes de la banda que conformaba junto al comisario de la Federal en la provincia, Dino Rossignoli, Ernesto y Nicolás Bazán (padre e hijo) , Renzo González, Ernesto González, el comisario retirado Marcelo Salcedo y otro ex jefe de la Policía de Mendoza que se encuetra prófugo, Ángel Alberto Fava (separado de la fuerza en 2015 por Alfredo Cornejo). Éstos ex policías junto a Bustos se se encargaban de la seguridad de las cuevas, disfrazadas dos de ellas de joyerías: Stefano Canella y Vía Roma.
El fiscal Marcelo Garnica les imputó el delito de asociación ilícita a los integrantes de la organización, que está conformada por otros agentes y una contadora.
Ver: El jefe de la Policía Federal de Mendoza fue imputado y hay 4 prófugos
El funcionamiento de la banda dedicada a la comercialización de divisas extranjeras estaba muy bien aceitado. Estaban los ex policías y el reciente detenido Roberto Bustos que estaban encargados de la seguridad. En tanto que el jefe de la Federal, Rossignoli, recibía coimas de los cueveros a cambio de protección, mantener a los sabuesos lejos de ellos, al tiempo que disfrazaban este negocio clandestino con joyerías.
Pero no solo cometían este delito, también se los vincula a los integrantes del entramado con la comercialización de drogas. Los más jóvenes, liderados por Nicolás Bazán quien había abierto dos boliches, vendían estupefacientes.
Ver: Doble crimen en una finca de Las Heras: apuñalaron a una pareja de ancianos