Los imputados pagaron una fianza de 300.000 pesos cada uno.
Liberaron al médico y a los dueños del geriátrico de San Rafael
El médico que invitaba a los vecinos a vacunarse en un domicilio privado de San Rafael y los dueños de tres geriátricos fueron liberados este martes al pagar una fianza de 300.000 pesos.
Se trata del doctor Rubén López y los dueños de la vivienda donde se citaba a la gente a inocularse, Hugo Ochoa y su esposa Teresa Chaine, quienes estaban a cargo de las residencias de adultos mayores.
En tanto el enfermero -quien tiene la matrícula vencida desde el 2014 pero estaba ejerciendo su labor- se le impuso una caución juratoria porque no cuenta con un patrimonio suficiente para responder a la fianza.
Ochoa fue imputado por el delito de peculado, que estipula de 2 a 10 años de prisión para el funcionario público que sustrae bienes del Estado. Su esposa, que estaba en el domicilio, también fue acusada por el mismo delito pero en calidad de partícipe primaria y arriesga la misma pena.
Cada uno de ellos más los tres pacientes que concurrieron al geriátrico a vacunarse seguirán imputados en la causa en la que se investiga la inoculación ilegal de vacunas contra el Covid-19 y se les impuso la prohibición de mantener contacto y comunicación entre ellos, bajo apercibimiento de ordenarse su detención.
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El hecho ocurrió cuando el director de la región sur, Abel Freindemberg, recibió información que daba a entender de vacunacion irregular contra el Covid-19 en un domicilio privado de San Rafael . Ante este dato de gravedad, el funcionario realizó la denuncia ante el fiscal Javier Giaroli, quien realizó un allanamiento en un geriátrico y se detuvieron e imputaron al médico, al dueño de la vivienda y a su esposa,un enfermero y tres vecinos que habían concurrido a inocularse.
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