Maximiliano Pilepich tenía una deuda muy importante con Pérez Algaba y además, ya le habría disparado antes.
El fiscal del caso del "Lechuga" reveló una trama de deudas y odios
El reciente crimen del empresario Fernando Pérez Algaba, apodado "Lechuga", ha sacudido a la comunidad y desvelado un trasfondo de conflictos y relaciones tumultuosas. El fiscal de Lomas de Zamora, Marcelo Domínguez, ha revelado detalles impactantes sobre el motivo detrás del asesinato, señalando una deuda financiera y una relación cargada de "amores y odio" como los móviles detrás del trágico suceso.
Según el pedido de detenciones presentado por el fiscal, el imputado Maximiliano Pilepich tenía una deuda pendiente con la víctima de 50,000 dólares y 17 terrenos. Esta deuda había sido documentada en un acuerdo que incluía un reconocimiento de deuda y tenía la firma certificada en una escribanía. El crimen ocurrió después de la suscripción de este documento, lo que sugiere que el asesinato estaba relacionado con la exoneración de Pilepich de esta deuda y la ganancia ilegítima resultante.
El fiscal también resaltó la complejidad de la relación entre Pilepich y Pérez Algaba, caracterizada por "amores y odio". Se mencionan discusiones, peleas y amenazas recurrentes entre ambos, incluso llegando al punto de que Pilepich habría disparado en una ocasión anterior a Pérez Algaba, aunque sin herirlo. Este histórico conflicto habría desempeñado un papel crucial en el trágico desenlace.
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El día del crimen, Pérez Algaba se dirigía a cobrar la deuda que Pilepich le debía. La víctima tenía previsto recibir un primer pago de veinte mil dólares en el predio "Renacer" en General Rodríguez. Sin embargo, en un mensaje de audio enviado por la red social WhatsApp, Pérez Algaba expresó su temor a ser baleado y por su vida. En otro audio, reveló que Pilepich había retirado documentos de una escribanía, lo que aumentó sus preocupaciones por su seguridad.
El fiscal Domínguez ha subrayado la gravedad del caso, señalando el agravante de homicidio por "codicia". El crimen no solo ha desentrañó una trama de deudas financieras y resentimientos pasados, sino que también reveló el temor real de la víctima a ser atacada.
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