Se trata de la suegra del principal sospechoso del crimen, Biran Ríos. Además, la pareja de éste e hija de la nueva imputada dejó de estar implicada directamente en el homicidio.
Por el crimen del jubilado en San Rafael hay una nueva acusada
En crimen del cordobés Héctor Dionisio Aguilar (64) sumó esta semana una nueva imputada a la investigación. Se trata de Mercedes Montaña, madre de Silvia Luffi, quien ya estaba acusada en el expediente. Cabe destacar que Luffi era la pareja del principal sospechoso del crimen, Brian Ríos.
Según estima el fiscal Javier Giaroli, Montaña, quien es suegra de Ríos, recibió algunas de las transferencias que Aguilar realizó, engañado sobre una hija que había tenido en un encuentro ocasional y que la niña la estaba pasando mal económicamente. Por esta razón, se decidió imputarla por el delito de estafa en modalidad continuada.
En la misma línea, en las últimas horas se produjo un cambio en la situación procesal de varios de los involucrados. Silvia Luffi, Alan Martínez y Hernán Oviedo dejaron de estar acusados del homicidio de Aguilar y ahora, junto con Montaña, solo enfrentan cargos por la estafa contra el cordobés.
El único acusado por el asesinato del hombre oriundo de Córdoba es Brian Ríos, para quien el fiscal mantiene la calificación de autor de los delitos de homicidio criminis causa (para ocultar otro delito) y agravado por alevosía, además de estafa y robo agravado.
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De esta manera, el principal sospechoso de haber cometido el homicidio de Aguilar es Brian Ríos (30), un ex presidiario que engañó al jubilado cordobés haciéndose pasar por una mujer con la cual, supuestamente, la víctima tenía una hija. De esta forma, logró que Aguilar le transfiriera dinero a Luffi, Martínez, Oviedo y Montaña, y consiguió que el cordobés viajara a San Rafael a principios de julio pasado. Una vez en la zona de Salto de las Rosas, Ríos habría intentado robarle el auto a Aguilar y posteriormente lo habría apuñalado. Luego, habría llevado el cuerpo hasta un descampado cercano a la mina de Sierra Pintada, donde lo habría rematado con un golpe en la cabeza utilizando una piedra, ocultando posteriormente su cuerpo bajo una pirca de piedras lajas.
Se estima que Ríos asesinó a Aguilar el mismo día en que este último llegó a San Rafael, es decir, el 3 de julio. Sin embargo, el presunto asesino no reveló la ubicación del cuerpo hasta más de 20 días después, cuando las pruebas en su contra ya eran contundentes.
Es importante recordar que, tal como informó oportunamente Diario San Rafael, el próximo miércoles se discutirá la solicitud de prisión preventiva para algunos de los acusados. En esa audiencia, el fiscal Giaroli pedirá que Ríos, Martínez y Oviedo permanezcan detenidos (los dos últimos ya se encuentran en prisión por otros casos), mientras que se espera que la querella solicite que se determine la prisión preventiva también para Luffi, quien actualmente se encuentra bajo arresto domiciliario. Montaña y César Campos, acusado de encubrimiento por ocultar el auto de Aguilar, permanecerán en libertad.
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