Cerca de las 3 de la mañana, Micaela Méndez (27) dijo a los guardias que fue golpeada por compañeras de celda. Fue revisada y se constataron lesiones.
Florencia: la detenida denunció que fue golpeada en su celda
Ayer, el jefe de fiscales de homicidio, Fernando Guzzo, anticipó que los detenidos por el crimen de Florencia Romano -Pablo Arancibia (33) y Micaela Méndez (27)- serían trasladados a la cárcel, donde pasarían su primera noche en calidad de detenidos.
Así se hizo efectivo cerca de la medianoche, y horas después Méndez denunció que fue golpeada por sus compañeras de celda. La mujer advirtió a los guardias y éstos la trasladaron al sector de sanidad, donde fue revisada y se verificaron lesiones menores.
Según fuentes oficiales, a las 2.55 de este viernes Méndez pidió salir de la celda porque, según denunció, había sido agredida por sus compañeras. Ante eso, se actuó según el protocolo: la llevaron a revisación médica y constataron "escoriaciones".
Almafuerte II, el lugar de detención de Méndez.
"Tenía moretones en algunas partes del cuerpo, pero no señales clásicas de haberse peleado con compañeras de celda: generalmente se ven cortes en la cara o lastimaduras en los ojos", confiaron al Post desde el Servicios Penitenciario.
Micaela Méndez y Pablo Arancibia, los detenidos.
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De hecho, sugirieron que "podrían ser marcas propias de la detención", donde suelen producirse situaciones de tensión y termina aplicándose la fuerza para ejecutar la orden judicial. Méndez continuará detenida en el penal de Almafuerte II, desde hace poco ocupado por mujeres.
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