Brian Ríos, el acusado de ser el autor material del crimen, arriesga la máxima pena.
Le hicieron creer que tenía una hija en San Rafael, viajó y lo mataron: el juicio
El caso de un cordobés estafado en su buena fe y asesinado en Mendoza ya está siendo juzgado. En esta instancia, juzgan a Brian "Gato" Ríos, imputado por homicidio agravado por ser cometido para garantizar la impunidad de otro delito -el robo y la estafa- y por ser cometido con alevosía, por el crimen de Héctor Dionisio Aguilar.
El acusado, Ríos, ya reconoció su culpabilidad, motivo por el cual las partes intervinientes debatieron acerca de la necesidad de un juicio por jurado, teniendo en cuenta que "los presupuestos fácticas ya están claros", según explicó la doctora Claudia Fajardo, representante de la querella, en diálogo con FM Vos y Diario San Rafael.
Fajardo detalló que los hechos comenzaron cuando Ríos engañó a Aguilar bajo una falsa identidad, haciéndose pasar por una mujer con una supuesta hija en situación de vulnerabilidad. Esta mujer, según la historia creada por Ríos, guardaba un parecido físico con una de las hijas de Aguilar, lo que permitió a Ríos ganarse la confianza de la víctima. "Lo trajo desde San Basilio hasta San Rafael bajo un engaño. La intención de Héctor era llevar a esa mujer y a su hija a vivir a Córdoba", señaló Fajardo.
El relato de los hechos es escalofriante. Una vez que Aguilar llegó a San Rafael, fue atacado por Ríos en la zona de Salto de las Rosas, Cañada Seca, donde recibió varias heridas cortopunzantes. A pesar de estar gravemente herido, Aguilar fue trasladado por Ríos en su propio vehículo hasta una cantera en el Cerro Bola, un lugar desolado y conocido únicamente por el acusado. "Lo llevó en el asiento trasero, malherido, sin posibilidad de pedir ayuda. Luego, lo terminó de asesinar en esa cantera, golpeándolo con una piedra", detalló la abogada querellante. El ataque fue brutal, utilizando dos piedras, una de las cuales le rompió el tabique nasal, y la otra provocó un traumatismo de cráneo que resultó fatal.
Tras el asesinato, Ríos robó el vehículo de la víctima, así como el dinero que Aguilar llevaba consigo, procedente de su jubilación y aguinaldo. Aguilar había viajado con la idea de ayudar a la mujer que creía en situación de necesidad.
Ver: Primera condena en el caso del jubilado atado y ejecutado en San Rafael
La defensa de Ríos ha argumentado que el delito podría ser calificado como homicidio imprudente, lo que reduciría considerablemente la pena. Fajardo, sin embargo, sostiene que la gravedad del crimen amerita la máxima condena. "Nosotros pedimos la perpetua, no hay otra pena. No es un caso de homicidio imprudente; es un crimen con alevosía, premeditación y crueldad", afirmó contundente. El debate ahora se centra en si el juicio será con jurado o técnico. En su desarrollo, la fecha estimada sería entre febrero y marzo del próximo año, pero no se descarta la posibilidad de que se adelante un juicio técnico en los próximos meses. "Estamos a la espera de la comunicación oficial que defina qué tipo de juicio se llevará a cabo. El caso es claro y habrá un juicio por jurado, porque la familia de Héctor Dionisio Aguilar no descansará hasta que se haga justicia", enfatizó Fajardo.
Los familiares de Aguilar, representados por la doctora Fajardo, han sido firmes en su postura de exigir una condena ejemplar para Ríos. La defensa sigue, por su parte, buscando reducir la pena bajo el argumento de que no fue premeditado. Esta diferencia de criterios será el principal foco de discusión en las próximas audiencias, donde se definirá si el juicio termina vía técnica o popular.