La autopsia coindice con los testimonios de los detenidos: el reconocido camarógrafo y DT de vóley murió al caer al piso.
Los acusados por la muerte de Carlos Amieva podrían ser liberados
Los dos acusados por la muerte de Carlos Amieva en Tunuyán podrían ser liberados a la brevedad después de un giro en la causa que los favoreció: la autopsia coincide con la declaración que habían brindado Matías Javier Sicre (24) y su tío Diego Cristian Sicre (30).
Según consignó Sebastián Salas en Diario Uno, el Cuerpo Médico Forense (CMF) precisó que Amieva murió por una fractura mortal, producida por una caída desde su propia altura, prácticamente imposible de causar a través de golpes de otra persona. Así quedó descartada la versión que indicaba que los sospechosos lo golpearon "varias veces en el suelo".
En su declaración, los dos detenidos expusieron que hubo forcejeos, que Amieva tomó a Diego Sicre del cuello y su sobrino le pegó un golpe de puño en el rostro que lo hizo caer y golpearse la cabeza. Esta lesión en el ojo y las marcas de los agarrones son las únicas lesiones visibles, según la autopsia del CMF.
Debido a lo expuesto en el estudio y en base al testimonio de los acusados, la defensa a cargo de Daniel Sosa Arditti solicitó la libertad. El abogado pidió que Diego Sicre sea sobreseído por no participar de la pelea y que Matías Sicre sea imputado por el delito de "homicidio preterintencional", que prevé una pena de uno a tres años prisión, siendo excarcelable.
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El juez Oscar Balmes escuchó el pedido de la defensa y la resolución llegará el próximo lunes por la mañana. Para el fiscal Jorge Quiroga, del Valle de Uco, fue un homicidio simple.
Carlos Amieva, reconocido camarógrafo de medios de comunicación del Valle de Uco, docente, dirigente deportivo y director técnico de vóley, quedó internado con heridas graves por una pelea de tránsito ocurrida en la noche del pasado sábado 15 de enero.
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Amieva y los Sicres tuvieron el intercambio de palabras en calle Irigoyen hasta que se produjo la agresión física donde el DT de vóley quedó gravemente herido. Los Sicres se fueron del lugar y lograron deterlos las jornadas siguientes. Días después, el hombre murió en el Hospital Central.