El joven, de 25 años, fue arrestado este martes en Tunuyán. Las cámaras de seguridad registraron cuando ingresa a la casa de la víctima, a quien obligó a practicarle sexo oral. El cotejo de ADN determinó que el fluido seminal en la ropa de la víctima pertenece al detenido.
Dedos pintados y cárcel para el abusador de la anciana en la Sexta Sección
La fiscalía de Delitos contra la Integridad Sexual detuvo e imputó este miércoles por "abuso sexual con acceso carnal en concurso real con robo" a un joven de 25 años, quien sometió a una anciana española de 94 años el lunes pasado en la Sexta Sección, Ciudad de Mendoza.
Se trata de un hombre que se dedicaba a barrer veredas y, según quedó registrado en una cámara de seguridad, obligó a la anciana a ingresar por la fuerza a su casa, luego de que ella saliera a la vereda, y una vez adentro "la obligó a practicarle sexo oral", confirmaron desde la investigación.
El hecho se produjo en la mañana del lunes pasado, cerca de 11, en una vivienda ubicada en la calle Martínez de Rosas e Italia. Según se vio en las imágenes captadas, el agresor andaba por la zona y cuando la anciana salió a la puerta, el hombre la empujó y la obligó a ingresar.
Ya en el interior de la vivienda, según declaró la mujer, el sujeto la encerró en un baño y revisó las habitaciones de la casa, de donde se llevó $10.000 y un teléfono celular, y abusó de ella.
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El acusado fue detenido en Tunuyán y cuenta con antecedentes penales por nueve hechos diferentes entre hurtos, robos y encubrimientos. Sus restos de semen en la ropa de la anciana ultrajada coincidieron con su registro genético.
Tras la denuncia al 911, llegaron al lugar los investigadores de la Policía Científica quienes tomaron distintos rastros, entre ellos algunas muestras de ADN de la ropa de la víctima, que luego sirvieron para incriminar al depravado, agregaron las fuentes.
Los investigadores contaban además con una descripción exacta del delincuente gracias a los archivos de la cámara seguridad de la zona, donde se veía perfectamente al sujeto, que fue identificado como barrendero por los vecinos.
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El caso está calificado como robo y abuso sexual agravado y la investigación está en manos de la fiscal de Delitos contra la Integridad Sexual Cecilia Bignert.