Condenaron a un sanrafaelino que vendía videos de abuso sexual infantil

La investigación comenzó en el año 2024 y según fuentes judiciales se trata de un "caso complicado" que involucra a compradores internacionales. La sentencia se conoció este lunes.

Condenaron a un sanrafaelino que vendía videos de abuso sexual infantil

Por: Mendoza Post

 Julián Valentín Herrera, un joven de 20 años oriundo de San Rafael, fue condenado a 5 años y dos meses de prisión por la distribución y comercialización de material de abuso sexual infantil

La sentencia fue dictada este lunes en el marco de un juicio abreviado, en el cual el imputado reconoció los delitos. El juez de Garantías Claudio Gil aprobó la pena y Herrera deberá cumplirla en el penal de Almafuerte, sin posibilidad de beneficios.

El joven condenado ya se encontraba bajo la custodia de la Justicia desde agosto de 2024, tras ser detenido en el marco de una serie de investigaciones en las que también fueron aprehendidas varias personas, como por ejemplo, Gabriel Ramos Vilchez, ex candidato a concejal por el Partido Verde, quien fue sentenciado en octubre de 2024 a cuatro años y tres meses de prisión efectiva por el mismo delito.  

Detalles del caso

El fiscal Javier Giaroli, quien estuvo a cargo de la investigación, explicó que Herrera se dedicaba a la venta de videos y fotografías de abuso infantil a través de contactos internacionales, recibiendo pagos mediante transferencias virtuales. 

 La sentencia fue dictada este lunes en el marco de un juicio abreviado, en el cual el imputado reconoció los delitos.

En esta dirección, según la información compartida por el fiscal, el caso cuenta con una considerable complejidad  ya que involucra a compradores internacionales que también podrían enfrentar imputaciones en el marco de la causa. 

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Según informó el sitio InfoYa!, el fiscal Giaroli reconoció en una entrevista que los resultados de las pericias psicológicas y psiquiátricas de Herrera revelaron que el joven condenado presentaba "rasgos ludópatas" y que habría recurrido a la venta de material de abuso infantil como una forma de financiar su adicción al juego.  A pesar de la condena, la investigación sigue abierta y se espera que la Justicia avance en nuevas imputaciones contra los compradores del material en cuestión. 

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