Una de cada 500 personas de entre 1 y 35 años sufre un mal hereditario que puede causar la muerte repentina.
Muerte súbita en jóvenes: lo que hay que saber
La miocardiopatía hipertrófica (MCPH) es una patología compleja y relativamente común que ocurre en una de cada 500 personas de entre 1 y 35 años y está directamente relacionada con la muerte súbita.
Se trata de una enfermedad hereditaria del músculo cardíaco que se caracteriza por la presencia de un engrosamiento anormal de las paredes del corazón sin causa aparente, según citó la agencia Noticias Argentinas.
Tras el fallecimiento de un corredor durante la última maratón de Buenos Aires, Fernando Scazzuso, jefe de la Sección Electrofisiología y Arritmias del Instituto Cardiovascular (ICBA), destacó que la MCPH "es la causa más frecuente de muerte súbita en adultos jóvenes y en deportistas".
Scazzuso, remarcó que, en general, las personas con mayor riesgo de muerte súbita "se encuentran en los dos polos de la vida".
"Así en un extremo encontramos la muerte súbita del lactante, como la principal causa de muerte en recién nacidos entre el mes y los 6 meses de vida, con una incidencia de hasta el 0,5%. Su causa es multifactorial. Mientras que en el otro extremo se encuentran las personas mayores de 40 años y esta asociado con la enfermedad coronaria en el 80 % de los casos", añadió.
Sin embargo, aclaró que entre el año y los 35 años de vida la miocardiopatía hipertrófica (MCPH) "es una patología compleja y relativamente común que ocurre en 1 de cada 500 personas".
"Los síndromes arritmogénicos tienen especial importancia. Así podemos reconocer al Wolff Parkinson White, al síndrome del QT prolongado, el síndrome de Brugada y a la displasia arritmogénica del ventrículo derecho entre las más prevalentes. Todas estas son entidades que diferentes mecanismos provocan una arritmia ventricular llamada fibrilación ventricular que desencadena un paro cardíaco", indicó el experto.
El especialista manifestó que la prevención de la muerte súbita se realiza "mediante la consulta médica, donde un interrogatorio y un examen físico son realizados para la pesquisa de dichas patologías".
"La evaluación se completa mediante la realización de un electrocardiograma, una ecografía cardíaca y una prueba ergométrica (electrocardiograma de esfuerzo) para determinar el riesgo de muerte súbita. Así, la muerte súbita en jóvenes (1-35 años) corresponde a causas diferentes que las del adulto o del lactante, sin embargo su prevención consiste básicamente en la consulta con el médico para descartar cualquier posibilidad en la ocurrencia de tan devastador evento", añadió.