Paolo Rocca también confesó que el mundo empresario estaba al tanto de lo que sucedía en el kichnerismo pero que no fueron cómplices.
El CEO de Techint reconoció que pagó para lograr acuerdos
El principal accionista del Grupo Techint, Paolo Rocca, aseguró hoy que él y sus empleados jerárquicos fueron "conscientes de lo que pasaba" en torno a los presuntos pedidos de coimas del Gobierno kirchnerista, pero aseguró que "no fue cómplice ni partícipe".
Rocca sostuvo que "Techint no participó del club de la corrupción de ninguna manera" y señaló que esa compañía, la más grande del país en materia de infraestructuras, apenas logró el 1 por ciento de participación "de toda la inversión gestionada por el Ministerio de Planificación (Federal) e inversión pública en la Argentina" durante el gobierno anterior.
"Fuimos conscientes de lo que pasaba, sí. Yo creo que sabíamos que las cosas no estaban bien. Pero creo que no fuimos ni cómplices ni partícipes de todo esto", dijo Rocca al hablar ante hombres de negocios en un evento de la Asociación Empresaria Argentina (AEA) en un hotel porteño.
El empresario consideró que la causa judicial abierta por los "cuadernos" en los que un ex chofer oficial relataba un presunto circuito de coimas y aportes para la campaña electoral de 2013 no afectará el negocio del Grupo Techint.
"El Grupo Techint está muy comprometido con Vaca Muerta como nunca estuvo en los pasados doce años y no tiene proyecto de tal envergadura en ningún lugar el mundo. Hoy se dan las condiciones", dijo el empresario.
Tras haber sido citado como testigo en la causa de los cuadernos, la semana pasada Luis Betnaza, ejecutivo de la compañía Techint, reconoció ante la Justicia el pago de "contribuciones" al gobierno kircnnerista para que intercediera ante Venezuela para solucionar el conflicto por la estatización de SIDOR en 2008, por el que negociaban una compensación.
Sobre esta declaración, Rocca también señaló en la cumbre de la Asociación Empresaria Argentina que "Betnaza accedió a una exigencia de un apoyo" para el Gobierno y explicó: "La retirada fue muy complicada, para nosotros fue un trauma enorme. El hostigamiento (del gobierno venezolano) fue muy fuerte. Actuamos para defender nuestra gente".