Quincho: El plato fuerte será Cornejo vs Cobos

Había que tener cierta paciencia de artesano para hacer la pasta de sal. Mientras hacía los preparativos para cocinar, al gordo le hizo gracia recordar algún tiempo adolescente, cuando le había dado por las artesanías y cantar a la gorra para recorrer la vieja Europa. Todavía existían la URSS y Yugoslavia era una sola. Había pasado un siglo, pero Julián aún conservaba ciertas dotes de tenor. Aunque ya no le gustaba cantar en público.

Un amigo de una distribuidora de productos de mar le había conseguido un róbalo de seis kilos. Un pez óseo, antiguo, depredador, costero patagónico y chileno, y de carne muy sabrosa. Muy bueno para el horno, y la parrilla. Y a Julián le había dado por cocinarlo a la sal. Consistía en abrirlo por completo, limpiarlo sin retirar cabeza ni cola, y colocarlo en una fuente sobre una "cama" de sal armada con una mezcla de sal gruesa, entrefina y fina, y un poco de agua, amasada prolijamente. Luego, el pescado se recubría por completo con la misma pasta, y se enviaba el enorme bollo al horno de barro del quincho. Sólo cuando la pasta de sal adquiriese un color marrón oscuro, a buena temperatura, el plato estaría listo. A pesar de los años de manejar el róbalo, las truchas, el salmón y el dorado de esa manera, a Julián siempre le maravillaba la química del alimento. El pescado sólo tomaría la cantidad de sal necesaria. Un equilibrio perfecto. Para acompañar, el gordo había preparado una "escalivada", días atrás. Una cocción de verduras asadas tales como cebollas, pimientos, berenjenas, dientes de ajo, todo cuidadosamente pelado y luego conservado en un enorme frasco con aceite; y sumaría un puré rústico de papas, ese que se arma con cáscaras y todo, y se condimenta con pimienta negra y nuez moscada.

El Ruso le miraba hacer los preparativos y pensaba en los casi 35 años en que los amigos llevaban juntándose cada fin de semana. Habían visto pasar de todo, desde aquellos días de 1985 cuando el regreso académico los reencontró en Mendoza. En aquellos tiempos, Alfonsín trataba de enderezar una democracia apenas naciente, al mismo tiempo que la economía empezaba a torcerse. (-...Tres décadas y media después... andamos con los mismos temores...) pensó el Ruso, pero no dijo nada. Anotó una larga lista en un borde de la hoja que leía, mientras su amigo cocinaba: Plan Austral, Plan Primavera, Me contestaron con el bolsillo, la hiperinflación en sus diversas versiones, la llegada de Menem, el "salariazo" y la "revolución productiva", la convertibilidad, el voto-cuota, el dólar barato, los "planes de competitividad", el 2001, la crisis, el dólar a las nubes, el ajustazo, los Lecop y los Petrom, luego el crecimiento a tasas chinas, y las crisis sucesivas otra vez. Ahora llevábamos unos 8 años de estancamiento, y 30 % de pobreza. El hombre de los negocios del grupete no quiso deprimirse. Bebió un sorbo de un aperitivo que había preparado Julián, y dio vuelta la hoja.

El gordo ya iba con la fuente de pescado rumbo al quincho. La ceremonia consistiría en "romper" la cáscara de sal con un martillito de cocina, retirarla con cuidado, y servir. Un merlot de las zonas frías de la bodega del Fin del Mundo. Ideal para el pescado y las pastas.

Una rápida mirada al cuadro que ornamenta la pared norte del quincho, la que da a Las Heras Orozco Village, le permitió a Julián descubrir a Raúl Querido de pie, sólo, en los jardines de Olivos.

En qué estaría pensando, ahora que sus hijos políticos andan preocupados por sus sociedades presidenciales.

...

Los amigos aplaudieron cuando Julián partió la cobertura de sal del róbalo, y la retiró sin perder una pizca. Debajo, humeante, asomaría el pescado, sabroso y a punto. No precisaría más que unas gotas de oliva una vez servido. Y la charla se armó rapidito alrededor de Julio César Cleto Cobos, su semana de gloria, y el "agite" que se había armado alrededor de la interna oficial, tan o más divertida que la peronista. La diferencia, claro, la hace la estancia en el poder.

- Los que lo dan por muerto a Cobos, o especulan con que no se va a presentar, podrían estar cometiendo un error de proporciones bíblicas...- arrancó Julián, mientras servía las primeras porciones de pescado a la sal. - A ver... sigue teniendo su capital intacto con una gran porción del electorado... si lo ves por la calle y lo parás, te mira de frente y te habla, aunque seas Juan de los Palotes... sonríe siempre... nunca lo ves enojado ni mal encuadrado... sigue teniendo el aspecto de tipo común... genera empatía... si le "pegan" no contesta... Escuchen... el tipo llega al aeropuerto de Buenos Aires y la gente lo saluda y le pide "selfies". No ha perdido el halo de "rock-star" de pueblo... y eso, a la hora de votar, "garpa" - especuló el gordo. El Omar, el radical-radical-radical que habla con todos, hasta con los del otro lado, amagó interrumpir.

- Esperá... ya se todo lo que vas a decir... pero si no lo tienen en cuenta en la ecuación política, van a meter la pata...- anunció, mientras surtía a sus amigos del Merlot elegido para esta noche. Los demás se miraron, y el Omar contestó:

- Hay un escenario que no es electoral aún... eso está claro... piensen que, según la ley electoral de Mendoza, estamos a menos de un año de las PASO para gobernador, intendentes, y todos los cargos provinciales...-

- ¿Cuándo es eso?

- En el segundo domingo de junio, y la general, el último de setiembre...- aclaró el Omar, y siguió. - En ese escenario previo, está claro que Cornejo y Cobos, en ese orden, son los dirigentes con mayor imagen de Mendoza, no sólo en su partido, sino de todos. Y es cierto que no considerar la influencia de Cobos es un error. Yo creo que nadie deja de considerarlo. Que le "peguen" porque especula, o porque mantiene en suspenso la interna oficial hasta que se le cante, al "estilo Cleto", es otro asunto. Pero vayamos a lo concreto: Fue la semana del Julio, de eso no hay dudas. Tuvo mucha prensa nacional, fueron los diez años del "No Positivo", mucha TV política, "medalla de oro" de TN, en Código Político, y luego aquella aparición "distraída" en la que anunciaba su probable voluntad de ser candidato a gobernador. Es lógico que haya nervios cuando el tipo dice "lo estoy evaluando", porque su candidatura no cierra la ecuación política oficial.

- ¿Y entonces? - preguntó el gordo, con ánimo de provocar. Le divertía el enojo de cierta parte del oficialismo con Cobos.

- A ver... vamos a los números. Según los sondeos que tiene Cornejo, y con los que trabaja su equipo de "ingeniería política", Cobos mide bien en una porción del electorado adulto, bastante mayor, que fueron votantes del Julio, alguna vez del peronismo, y luego de Ramón, muy alto en las franjas femeninas, madres, abuelas... pero los jóvenes, que se suman de a 50.000 electores cada dos años, no lo registran. No lo conocen. No recuerdan siquiera que fue gobernador, o qué pasó en la noche del "No Positivo". Tenían tres o cuatro años cuando el Julio reemplazó a Iglesias. Martín Kerchner y Rody Suárez "cortan" una porción más pareja de gente, pero depende con quién hables, te dicen cuál mide más o menos. La gente de Martín dice que mide como los intendentes. Ahora estoy hablando de márgenes de conocimiento. Bien... Y Tadeo, mide muy bien entre los jóvenes... Con una agenda muy piola, ambiental, tecnológica, moderna... A ver amigos no sé si todo esto es tan así, pero es la cuenta que tienen en el gobierno... ¿ok? -

- Sí...- le respondieron a coro.

- Entonces, lo que les ha medido Elbio Rodríguez es que cualquier candidato de Cornejo estaría venciendo a Cobos. Ese dato ya se sabe, la encuesta tiene algún tiempo ya. Pero con esos datos, y el apoyo de los intendentes, de la mayoría al menos; es que el Alfredo aspira a "contener" el avance de Cleto, y resolver la interna oficial sin que la sangre llegue al río. Al menos, entre los radicales.

- ¿Va a negociar? - preguntó Ludovico, el más PRO del grupo, mientras montaba una generosa cucharada de escalivada catalana sobre una rodaja -grosera- de pan casero. Julián le reprobó con la mirada. El Omar contestó, siguiendo el hilo.

- Sí, menos la candidatura a gobernador, todo se charla. Pero hubo cambios en el ánimo oficial. Meses atrás, Cornejo juraba hasta por la camiseta del Tomba que Cobos no se animaría a correr unas elecciones. Ahora, dice casi lo mismo, pero le agrega la advertencia "me puedo equivocar". Así es que -si el Alfredo logra imponer a un candidato a gobernador- lo que va a ocurrir es que Cobos podría meter partes importantes de la lista. El gordo interrumpió.

- Lo que dicen mis amigos radicales, es que la preferencia de Alfredo es ir con Kerchner de candidato a gobernador, y con la reelección de todos los intendentes. Y que esa movida tiene un "piso" electoral del 40 %.

- Es probable, sea Martín, o Tadeo, o Rody, u otro "candidato del Alfredo". Pero es cierto que su preferencia sería esa, alguien del equipo que le garantice continuidad de las políticas públicas, y que no aparezca cediendo el año que viene ante los gremios, o ante cualquier factor de presión. Pero bueno... hay que ver... lo que prefiere el gobierno es cerrar una interna sin sangre, que contenga a todos. Además, si el Alfredo opta por Kerchner, Suárez, Tadeo, y probablemente Marcelino le apoyarían. Pero no sería una PASO cómoda, para nadie. Ni para Cobos, ni para Cornejo.

- ¿Julio está jugando a ser "contrafigura" del Alfredo?

- Eso está claro.

- ¿Y su novia, Natalia, qué dice? - preguntó el Ruso, con ganas de joder. El Omar tomó un sorbo de vino antes de joder.

- A ver... hay extensos pliegues del radicalismo que le dan a Natalia Obón una influencia y un poder que no tiene, y que no quiere. Lo veo más como una jugada del cornejismo íntimo para "desmarcarlo" a Cleto. Ella fue la primera en decirle que no debía ser gobernador, pero bueno. Hay en el radicalismo capitalino, que fue la cuna militante de la chica, quienes comparten esa visión que tienen algunos funcionarios y dirigentes. La verdad sólo la saben Cleto y la novia. Pero volviendo a lo político, sí es cierto que -si el Julio quiere ser gobernador- la campaña no va a ser sencilla. Empecemos con que ya le contestaron muy duro, a modo de "estate quieto", aunque el cornejismo debería aprender de la historia. Si le "pegan" a Cobos, lo van a fortalecer. Y es cierto además que él gobernó con tasas de crecimiento asombrosas, con montañas de guita, y que no obstante no trasformó la economía de Mendoza. Poco más de diez años después, esta es una provincia de una economía modesta, en un país pobre... ¿no? Pero insisto: la mejor ecuación oficial es un candidato del Alfredo, y la reelección de todos los intendentes. Y dejar que corra la ley electoral modificada, la 8619, y tener unas elecciones desdobladas de las presidenciales.

- Todo muy lindo, pero se están olvidando de Omar De Marchi...- soltó Ludovico. Y les enchastró a sus amigos la foto del almuerzo a solas que tuvieron el viernes, el lujanino y el gobernador.

- ¿De qué hablaron? - preguntó Julián.

- No sé si fueron "al hueso". Digamos que fue una larga y amable partida de Póker entre dos viejos conocidos y aliados.

- ¿Pero De Marchi va o no va? ¿Se anima, o no...? - insistió el Ruso.

- No es una cuestión de coraje...- explicó Ludovico. - Si no, de mediciones. El Omar no se va a suicidar ni invertir una fortuna en una campaña fallida. Si llegado el momento, digamos, a fin de año, mide un poco menos que Cobos pero más que los candidatos del Alfredo, se va a lanzar. Y eso el "gober" ya lo sabe. Veremos... se pone muuuuuuuy entretenido. La pregunta es qué hará el Alfredo en un escenario donde ya compitan dos, como Cobos y De Marchi... ¿no?

- Si es así, va con el suyo, y no arregla con ninguno de los dos. Pero sería el peor escenario de todos...- dijo el Omar, el más oficialista del grupo, mientras se zampaba los últimos pedacitos del pescado a la sal.

- Por las dudas, yo voy acumulando pochoclo y butaca en primera fila. Va a estar como para no perderse ni un minuto del show...- dijo el gordo, y los amigos estallaron en carcajadas.

La cena fue llegando a su fin. Después del pescado a la sal, Julián sirvió unas peras al Malbec, cocinadas con auténticas chauchas de vainilla, de esas que cuesta conseguir. Luego de un buen café y un bajativo Ünderberg, los amigos partieron rumbo a los autos.

...

- Gordo... qué bien les está yendo a los gastronómicos y a los hoteleros en estos días... ¿no? Con el dólar a 28 o 29 mangos... la están juntando con la pala... está todo lleno de chilenos, de peruanos, y de brasileños... más las vacaciones de invierno...

- Es verdad... pero no lo dicen... ni una declaración... ni un poco de "onda". En el gobierno están bastante calentitos con el sector, por eso...

- Mirá vos... escuchame... me dijeron que se viene el fallo de la Suprema Corte por el caso de la Universidad Champagnat...

- Puede ser... o puede ser una nueva intervención... ¿Te acordás cómo es?

- Maso...

- En 2011, el gobierno de Celso intervino la Fundación Santa María, que maneja la Champagnat, por una serie de quilombos. Cómo sería, que hasta encontraron tres millones de dólares en efectivo en una de las instalaciones. Esa intervención, fue con funcionarios cercanos a Jaque primero y Pérez después. Con "enchufes" más tarde en la propia Corte y en la Fiscalía de Estado. El que conoce bien la trama es el "Chiqui" Cazabán. El asunto es que, vía salarios, muchos "conectados" al PJ sacaron fortunas de ahí, pero hay una denuncia penal de los herederos de Lucena Carrillo, los propietarios originales, recordá que la Champagnat tiene varias décadas, y eso estaría al salir en una de las salas de la Corte... veremos... es un caso con costados políticos interesantes... También la Dirección de Personas Jurídicas de la provincia anda con algo... ¡No sea cosa que esto termine en nuevos tironeos entre el peronismo y el gobierno...!

- ¡Jajajaaaaa! ¡Lo que les faltaba a los muchachos, otra pelea con Cornejo!

- No sé... no creo... los compañeros tienen sus propios problemas que resolver, antes que los negocios. Y esto venía hace tiempo... Mirá, cuando era gobernador Cobos, a Sergio Marinelli le llevaron el "negocio" de quedarse con la Champagnat vía intervención, y no agarraron. Años después, "la hicieron" los compañeros.

- ¡Todo sea por la educación!

- ¡Jajajaaaaaaa vamos, Argentina Potencia!

...

Y así, entre bromas y chanzas, los amigos desaparecieron en el sentido estricto de la palabra. Nunca tan vigente aquellas palabras del Capitán Ingeniero.

"Hay que pasar el invierno..."

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