La publicación del libro "Amor y violencia, la verdadera historia de Perón y Nelly Rivas" devela un episodio casi desconocido de la historia argentina.
La historia perdida de la niña-amante de Perón
El polémico libro fue publicado por el abogado de Nelly, Juan Ovidio Zavala de 90 años quien revela con documentación y testimonios inéditos los detalles de esta particular relación entre la entonces niña y el General.
Todo comenzó en 1953 cuando Nelly y Juan Domingo Perón se conocieron durante la visita a la residencia oficial del general de unas jóvenes de la Unión de Estudiantes Secundarios, entre las cuales estaba Rivas. Las primeras palabras del general dirigidas a la joven fueron: “¿Cómo te llamás”?
Luego de ese primer encuentro, a la joven se le encargó el cuidado de los perros de la residencia oficial, por ello se le adjudicó un dormitorio que había sido utilizado por Evita.
La aproximación entre ambos fue haciéndose de a poco más estrecha hasta que la adolescente de 14 años sucumbió a los encantos de Perón.
Pero la relación no duró mucho. Tras el golpe de 1955, Nelly queda en una situación de total desamparo. Antes de refugiarse, Perón le hace entrega de algunas joyas y 400.000 pesos.
Y desde su refugio le envía varias cartas: "Nenita, quedáte tranquila. Con lo que te dejé podrás vivir un tiempo. En cuanto llegue te mandaré a buscar y así los dos haremos una vida tranquila donde sea".
Los antiperonistas allanaron la casa de Rivas y se llevaron todo lo que encontraron. La joven trató de escapar a Paraguay, pero las nuevas autoridades militares la detuvieron en la frontera y la internaron en un asilo para prostitutas menores. "Ahí perdí el tren de la historia", le confesaría Nelly a Zavala.
Acto seguido, los militares impulsaron un juicio contra Perón por estupro (delito sexual), para lo que trataron de retirarles a los padres de Nelly la patria potestad. La estrategia nunca logró su objetivo final, juzgar al general en Argentina, pero convirtió la vida de Rivas en una pesadilla sin fin.
Zavala, reconoce que el estupro existió, pero subraya que las autoridades se saltaron todas las normas jurídicas para realizar la denuncia. Aceptó llevar la defensa de los padres de Nelly, acusados de complicidad en el estupro, y más tarde se ocupó del caso de la joven, que reclamaba los bienes robados durante el golpe.
"El libro pretende reivindicar la figura de Nelly y denunciar por primera vez con pruebas documentadas la monstruosidad jurídica que se cometió contra esta mujer", cuenta Zavala a El Mundo.
Años más tarde, Nelly se casó y tuvo dos hijos. Cuando Perón regreso al país en 1973, fue a visitarlo por última vez.
Los posteriores años de dictadura sepultó aún más la historia de la niña-amante de Perón ultrajada por el Estado durante décadas, cuya historia sale a flote hoy gracias a la publicación de este libro.



