El mendocino que fue campeón del mundo y respira jiu jitsu

Mendoza es tierra de campeones de boxeo, de algunos futbolistas destacados y desde hace un tiempo, de jiu jitsu brasileño. Aunque parezca extraño para los que están fuera de la órbita de las artes marciales, la provincia tiene dos campeones del mundo recientemente consagrados en San Pablo: Romina Barone y Juan Pablo Vallone.

"Vender el auto fue lo más fácil, tengo una casa y una novia que me banca"

El caso de Juan Pablo es algo más conocido, ya que algunos medios reflejaron el hecho de que haya vendido su auto para poder participar de la competencia aunque el aclara que eso es lo de menos: "Vender el auto fue lo más fácil, yo tengo una casa y una novia que me banca. Tengo comodidades. Yo vi en Brasil los esfuerzos que hacen para entrenarse y competir".

Charlar con Juan Pablo es una ventana al mundo de un deporte desconocido para la mayoría de los mendocinos. El guerrero cuenta las diferencia entre Mendoza y lo que vivió en tierras brasileñas, donde el jiu jitsu es parte de la cultura: "El nivel de allá es tremendo. Nos llevan 30 años. Mientras nosotros crecemos muchísimo, ellos crecen el doble. Tienen proyectos sociales apuntados al jiu jitsu. Los chicos andan con kimono por la calle. Mientras acá los chicos juegan al fútbol con una botellita al costado de la calle, los chicos allá salen de pelear en el gimnasio y pelean en la calle".

"En Brasil los chicos andan con el kimono por la calle"

Las experiencias enriquecieron a Juan Pablo que volvió más motivado de lo que se fue: "Entrené en dos academias de nivel mundial, con tipos que eran 5 veces campeones del mundo. Comí lo mismo y entrené con ellos. Me aceptaron con una humildad impresionante".

"Antes de que yo peleara, lo hicieron dos chicos en silla de ruedas, fue emocionante"

El camino a ser campeón del mundo fue intenso los últimos dos años: "Fue durísimo, entrené muchísimo. No me gusta hablar de sacrificio, sí de esfuerzo. No hablo de sacrificio porque he visto cosas increíbles, antes de pelear yo, entraron dos chicos en silla de ruedas, se bajaron de ellas y se dieron con todo, en el gimnasio todos lloraban. Me saqué una foto con un luchador de 87 años".

¿Cómo se llega desde Mendoza a lo más alto en un arte marcial mixta brasileña? Juan Pablo explica: "En febrero me dije, `este año busco la medalla`. Me decían que no me presione pero entrené como una bestia. Me costó dar el peso pero pudimos. De repente estaba ganando, después en la semifinal, la final y luego con la medalla dorada. Tras la pelea caí en que era campeón del mundo".

Su amor por el jiu jitsu es la clave: "Me bajé del avión el domingo y fui el lunes a pelear y he entrenado toda la semana".

El dato curioso, es como un "pibe" mendocino toma contacto y se enamora de un deporte que se practica en espacios muy específicos, la explicación tiene todo un camino: "En la facultad (de educación física) saltó la posibilidad, mi viejo laburaba en Malargüe y tuve la chance de dar clases de hockey en el polideportivo de ese departamento. Me iba en traffic el sábado, daba clases y el domingo volvía. Ahí me dieron mucha bola y me apoyaron para poder hacer un curso en Buenos Aires. Ahí entré a un gimnasio donde recién empezaba a practicarse el cross-fit. Me dijeron que vaya a otro gimnasio, había gente de MMA y vi jiu jitsu por primera vez. Me fascinó y  me dijeron que había en Mendoza". 

"El jiu jitsu para mí es un estilo de vida. Con mis amigos a veces llegamos a un asado y nos ponemos a pelear"

Para un deportista amateur, el sustento es fundamental y Vallone cuenta: "Tengo el apoyo de mi novia que me banca en todas, soy profe de gimnasia y me dedico al entrenamiento personalizado, doy cursos de esa disciplina, soy ayudante de cátedra en la facultad. Doy clases particulares en el gimnasio antes y después de entrenarme cuatro horas. Me dicen que busque un político que me banque, pero no es mi idea. Le escribí a la secretaría de Deportes, me gustaría trabajar en un proyecto con un fin social".

A la hora de los agradecimiento, resalta dos pilares de su vida personal y deportiva: "Raúl Núñez, encargado del Team Academia 360 Mendoza y Melisa Jofré, mi novia. Son mis dos pilares".