El jefe de la Policía de Mendoza en medio del escándalo menos pensado

El hecho podría parecer menor, pero no lo es, ya que involucra al mismísimo jefe de la Policía de Mendoza, Roberto Munives.

 Todo empezó el pasado domingo 1º de mayo a la mañana, cuando el chofer del titular de la fuerza, Daniel Regules, fue a buscarlo para llevarlo a la apertura de sesiones legislativas, a cargo de Alfredo Cornejo.

Cuando iba con el vehículo oficial, una camioneta Amarok, chocó de manera imprevista. Por lo que pudo reconstruir el Post en exclusiva, gracias al aporte de diversas fuentes de información, ocurrió en la intersección de las calles Mitre y Aristóbulo del Valle, de Guaymallén.

El auto contra el que impactó es un Fiat Duna patente SDR195, conducido por Fernando González Nuñez y Mario Enrique Labra. Ambos resultaron lesionados.

Hasta ahí lo normal de todo accidente de tránsito. Pero ahora viene lo mejor: cuando llegó la policía para ver qué había ocurrido, Regules, el chofer de la Amarok, les manifestó que por orden de Munives no debían hacer nada, ya que todo se arreglaría entre las partes.

¿Por qué lo hizo? Porque tenía la licencia vencida. El dato fue confirmado por uno de los uniformados que asistieron al lugar.

“Estuvo todo mal hecho, ahí tendría que haber intervenido la comisaria, hacer actuaciones, ir la policía científica, etc”, advirtió a este diario el ocasional informante.

El hecho, como se dijo, pasó inadvertido hasta ahora. El Post lo da a conocer en exclusiva. Habrá que ver cómo sigue. 

Consultado por el Post, el jefe de la Policía confirmó el hecho, aunque relativizó que hubiera habido heridos. “Por suerte, todos resultaron ilesos”, sostuvo.

En el mismo sentido, explicó que el Duna circulaba de contramano y los semáforos en esa esquina funcionaban de manera intermitente.

Munives también confirmó que en el momento no se hicieron las actuaciones de rigor: “No se podía en el momento porque era el 1ro de Mayo, con todo lo que implicaba ese día; sin embargo, yo mismo constituí allí y vi que estaban todos bien, y luego se hizo todo lo que había que hacer. Todo ello quedo documentado en el 911”, aseveró.

El jefe de la Policía también reconoció que el chofer, no tenía su carnet de conducir en condiciones. Según Munives, Regules no tenía consigo la licencia que se requiere para la tarea que lleva a cabo, la profesional.

Finalmente, el funcionario admitió que no tenía intención de “desacreditar lo publicado” por este diario. Más aún, aportó una foto para mostrar que el vehículo oficial no sufrió ningún tipo de daño.

No obstante, según pudo saber este diario, el vehículo fue arreglado en las horas siguientes de ocurrido el hecho. "Le faltaba hasta el plástico del logo en la trompa", admitió una fuente reservada.