Se cumplen 10 años de la muerte de Néstor Kirchner. Escriben Celso Jaque, Juan Carlos Jaliff, Mario Adaro, Patricia Fadel, Ernesto Mancinelli, Mauricio Mazzón, Lucas Ilardo, Matías Stevanato, Roberto Righi y Carlos Ciurca.
Hoy en Memo: las anécdotas de 10 políticos mendocinos con Kirchner
Desde su primera visita a Mendoza, en el año 2000, hasta el recordado acto en Andes Talleres, de 2008, que concluyó con un encuentro privado con el entonces intendente Alfredo Cornejo en la Municipalidad de Godoy Cruz. Decenas de anécdotas con Néstor Kichner contadas por sus protagonistas: dirigentes del PJ y de otros partidos, al cumplirse 10 años de la muerte del expresidente.
Celso Jaque, exgobernador de Mendoza
Conocí a Néstor Kirchner cuando yo era intendente de Malargüe y él, gobernador de Santa Cruz. En el año 2000, él vino a Mendoza para encontrarse con los ocho intendentes que quedábamos del peronismo y realizamos una serie de visitas. Una de ellas en el este, en Palmira y Junín. Lo acompañábamos, íbamos en un auto y el chofer era Guillermo Amstutz. Ahí nos iba contando cómo imaginaba a la Argentina, la importancia que tenía la industria nacional y cuál era el proyecto que él quería para el país. Después, cuando se convoca a elecciones a presidente en 2003, nuestro partido tenía tres candidatos y yo no tenía dudas a quién acompañar y empezamos a trabajar. Recuerdo que en Mendoza, Malargüe fue el único lugar donde ganó.
Después viajé a Buenos Aires y me reuní con él en la Casa de Santa Cruz; hablamos de la campaña para el balotaje y cuáles eran las cosas necesarias para Malargüe. Néstor manifestaba su amor por un terruño que no conocía, pero que lo hacía feliz haber ganado allí. Yo le comentaba que ahí empieza la Patagonia. Hablamos de la importancia de contar con 51 mil hectáreas que eran del Ejército para ser aplicadas a la ley de arraigo de puesteros y resolver el problema de ellos para que puedan ser titulares de sus tierras y hacer desarrollo turístico, agrícola y minero. Fue un compromiso y en octubre de 2003, cuando era presidente, el primer lugar de Mendoza al que vino fue Malargüe y firmamos un convenio donde la Nación nos vendía a la Municipalidad estas tierras. Fue un día maravilloso, con miles de personas que se acercaban para tocarlo, saludarlo, gente de otros partidos que hacía lo posible para saludarlo. Siempre priorizó el contacto con la gente. Un gran recuerdo de alguien que además de ser un gran líder, logró con gestión consolidar la legitimidad que no tuvo en las urnas. Vivirá eternamente en nuestro recuerdo.