Todo empezó con un incidente de tránsito y terminaron en la Comisaría Tercera.
Extraña trifulca entre un policía, deliveries y abogadas en el Bombal
Un policía de Investigaciones de Mendoza terminó su mediodía de la peor manera ayer, luego de protagonizar una detención a mano limpia con un delivery de la empresa Pedidos Ya, y luego enfrentar a una mujer enfurecida, perteneciente a uno de los estudios de abogados más prestigiosos de Mendoza, sobre la calle Yrigoyen que divide a Ciudad de Godoy Cruz.
El policía en cuestión andaba de civil, armado y con su identificación, como es usual en Investigaciones. Cerca de la una y media de la tarde y con el tránsito embotellado a pesar de la pandemia, intentaba salir de la calle La Pampa para girar hacia el Este por Yrigoyen, en pleno corazón del Bombal, cuando tuvo un incidente con un "motociclista robusto que llevaba una mochila de Pedidos Ya" dice la actuación policial. El delivery intentaba pasar al policía por la derecha, y tal parece que empezó a los insultos pidiendo que "le deje pasar, porque estaba trabajando".
Una segunda moto de la misma empresa de reparto apareció, y entre los dos siguieron la diatriba verbal contra el policía, hasta que uno de ellos habría amenazado con golpearlo. El efectivo frenó su auto, sacó su credencial, y cuando quiso identificar a los motociclistas empezaron los problemas en serio. Uno de los deliveries no tenía patente. Se quiso fugar y terminó en el piso con el policía. Otro, escapó. En ese momento se acercó una mujer reclamando por el "maltrato" al muchacho de Pedidos Ya. El policía se identificó, pero tal parece que la mujer -luego se supo que es abogada del estudio Correa Llano- no habría querido escuchar razones.
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El policía denunció luego en sede fiscal, que la mujer le amenazó con "hacerle un gran problema en el trabajo...". La frecuencia policial ardía y llegaron móviles, vehículos particulares de Investigaciones, personal de Tránsito Municipal, policías femeninas para lidiar con las abogadas, que protestaban porque había un policía de civil armado. De hecho, de acuerdo a la presentación que hizo el policía protagonista de la trifulca, dijo que la mujer le aconsejó al delivery que no diera ningún dato ni mostrase su documento. También les habría sugerido a los uniformados que se estaban llevando al joven de la moto "como en los años setenta".
Finalmente, salvo la abogada, terminaron el policía y el delivery en la Tercera, dando explicaciones. Y todo, por un embotellamiento y la impaciencia del tránsito.
Menos mal que estamos en pandemia, y que debería circular la mitad de la gente por la calle.
Foto de portada: Imagen ilustrativa.
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